El renglón 021, “personal supernumerario”, fue creado para suplir de manera temporal la ausencia de maestros en el sector oficial. Con el paso de los años, los contratos bajo esta modalidad han ido en incremento. Información proporcionada por la cartera señala que de los 18 mil 865 que eran en el 2020 este año la cifra pasó a 23 mil 997, y para el próximo ciclo escolar podría aumentar.
La primaria es la que absorbe la mayor cantidad de estos docentes, pero es en básicos y diversificado donde la necesidad se hace más evidente, pues se cuenta con pocos puestos para personal permanente y la manera en cómo se han suplido estos vacíos es con plazas temporales, que se renuevan cada año y carecen de prestaciones laborales.
Durante 19 años la contratación de estos maestros no varió, con la derogatoria por parte del Mineduc del acuerdo gubernativo 287-2004, el proceso ahora será más ágil para atender la “inmediata demanda educativa” en el sector público, como asegura la cartera.
Sin embargo, maestros y exfuncionarios de la cartera ven con recelo que, con nuevos lineamientos -pendientes de darse a conocer-, los requisitos para ocupar las plazas sean minúsculos a riego de sacrificar la calidad educativa.
Cambios
El pasado 8 de septiembre el Mineduc derogó el acuerdo gubernativo 287-2004, el cual establecía el procedimiento técnico de reclutamiento, selección y contratación temporal de maestros en el renglón 021.
La normativa estaba vigente desde la administración de María del Carmen Aceña (2004-2008) y establecía “un sistema objetivo” de puntuación que incluía el nivel académico, experiencia laboral, habilidades cognitivas, residencia del postulante y dominio del idioma local. Conforme dicho punteo se hacía la contratación.
Pero con la publicación del acuerdo gubernativo 212-2023 ese procedimiento fue anulado y el Mineduc faculta ahora a la Dirección de Recursos Humanos para emitir los nuevos lineamientos, según establece el acuerdo ministerial 2835-2023 y que fue publicado el pasado 13 de septiembre, cuando entró en vigencia.
La cartera informó que el propósito de este cambio es facilitar la contratación de docentes y atender de manera inmediata la falta de estos mientras se hacen las convocatorias para nombramientos en el reglón 011 (personal permanente).
Agregó que los maestros que actualmente laboran en el renglón 021 continuarán su relación contractual con el Mineduc, tal como en los ciclos escolares anteriores.
El Ministerio de Educación informa sobre las contrataciones con cargo al renglón de gasto 021 “Personal supernumerario”. pic.twitter.com/YsxVwwe5wb
— Mineduc Guatemala (@MineducGT) September 14, 2023
Puntos para analizar
Este cambio repentino en la contratación de los docentes en el renglón 021 a pocos meses de la transición de gobierno ha causado reacciones diversas.
La derogación del acuerdo gubernativo 287-2004 eliminó el proceso por cinco días, hasta que el Mineduc publicó el acuerdo ministerial que faculta a la Dirección de Recursos Humanos establecer el nuevo procedimiento.
A criterio de Ester Ortega, exviceministra de Calidad Educativa, las autoridades ministeriales recapacitaron, pues eliminar la contratación en el renglón 021 ataría de manos a las autoridades entrantes, pues, aunque son plazas temporales, estas ayudan a ampliar la cobertura educativa, principalmente en la provincia, y el perjudicado sería el estudiante.
Miriam Castañeda, exviceministra Administrativa de Educación, menciona que la Dirección de Recursos Humanos no puede establecer una política de Recursos Humanos como lo dicta el acuerdo ministerial, estas emanan del Despacho Ministerial.
Por otro lado, señala que para las contrataciones 021 se requiere el diagnóstico de cada Dirección Departamental para saber cuántos docentes necesitan, información que luego remiten a Recursos Humanos que determina la cantidad de personal para cada departamento.
El tiempo, agrega, no le alcanzaría a esta administración para hacer ese análisis, como tampoco para establecer los nuevos procedimientos y lineamientos para el referido renglón, el próximo año.
Una docente de la provincia ve en este proceder “una estrategia para convulsionar a los docentes 021 y no dejarlos contratados para el siguiente ciclo escolar en diciembre como se acostumbra y dejarle una brasa caliente a las nuevas autoridades”.
Para el Sindicato Autónomo Magisterial Guatemalteco (SAMGUA), desde el tiempo de María del Carmen Aceña (2004) ningún ministro o presidente se había atrevido a tocar el acuerdo gubernativo 287-2004, y con cada Gobierno ha surgido el planteamiento de presupuestar a todos los docentes del sector público a cambio del apoyo del magisterio para surfear determinadas crisis política.
Sin embargo, con las próximas autoridades la organización refiere que se prevé un cambio, por lo que “los dirigentes del Mineduc crean está crisis” en las contrataciones, lo que perjudicaría a más de 700 mil estudiantes que se quedarían sin maestros.
Además, señalan que “el magisterio 021 vive coaccionado y amedrentado porque la confrontación de su papelería depende de los CTA (Coordinación Técnica Administrativa) y directores que en su mayoría están alineados al Sindicato Patronal”.
De esa cuenta, el Mineduc debe sentar las bases de diálogo para permitir una transición y contratación transparente en el 2024.
Mientras que Rosa Palacios, dirigente del Sindicato de Trabajadores de la Educación de Guatemala (STEG), indica que no pueden oponerse a lo que determine el ministerio en el tema de contrataciones, ya que este es el “ente regulador de las plazas de maestros”.
¿Y calidad educativa?
Ortega señala que si bien la cartera ha señalado que se contratarán los mismos maestros para que inicien en enero, lo que es positivo en beneficio de los alumnos, el nuevo acuerdo ministerial “no estipula si se mantienen las condiciones anteriores, lo cual podría dar lugar a que se contraten personas que no llenan los requisitos”.
En ese punto Castañeda agrega que la calidad educativa ha ido en detrimento en el sector público. Los bajos resultados de las últimas pruebas diagnósticas realizadas a los docentes que fueron publicadas en el informe de resultados 2015-2019 lo reflejan.
Solo uno de cada 10 de los que se sometió a la prueba alcanzó 60 puntos o más. En el área de Matemática solo tres de cada 10 respuestas que dieron los educadores resultaron correctas, mientras que en el examen de Lenguaje y Comunicación solo la mitad de las preguntas las respondieron de manera satisfactoria.