Se entregó por completo a la educación de los más necesitados como asignado al Colegio Indígena de Huehuetenango en 1981, durante los “años más turbulentos del país”, atribulado por los escuadrones de la muerte.
De acuerdo con la publicación, el 13 de febrero de 1982, cuando terminaba las clases habituales, subió a su cuarto por la noche y se sentó a trabajar en sus temas. Allí fue golpeado hasta la muerte por varios sujetos que luego se perdieron en la oscuridad de la noche.
Según el postulador de la causa de beatificación, la Orden ya había recibido amenazas de muerte, pero el Hermano Santiago llegó con energía para continuar sin miedo la educación de los más pobres, como la hace un verdadero misionero y mártir.
James Miller, llamado “el Mártir de la Educación”, nació en Steven Points, Estados Unidos, y en sus primeros años de misión fue enviado a Nicaragua en 1969.
La beatificación es el paso previo a la canonización (santificación), después de una extensa investigación y comprobación de milagros atribuidos a un religioso dentro de la Iglesia Católica.
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