Fue el 4 de febrero de este año cuando Téllez sufrió graves quemaduras luego de una explosión que fue provocada por una fuga de gas en el comedor donde ella trabajaba.
Téllez tiene 15 años y trabajaba en una taquería para ayudar a su mamá, también ahorraba para poder participar en las diferentes competencias de atletismo que tenía programadas.
Pero la explosión le provocó heridas en la mayor parte de su cuerpo. El 8 de febrero fue trasladada vía aérea al Hospital Regional de Escuintla para que fuera atendida por médicos pediatras especializados en quemaduras.
En el hospital, Téllez no era la única menor que estaba siendo atendida por quemaduras. La cámara hiperbárica que fue instalada en el lugar recibía a niños de todas las edades y con diferentes tipos de heridas en la piel.
Después de estar un mes bajo tratamiento, la piel de Téllez logró regenerarse y la atleta fue dada de alta.
El Dr. Willy Menéndez, Jefe del Departamento de Pediatría, dijo que los resultados de la cámara hiperbárica fueron favorables para la atleta. Asimismo, indicó que en el hospital de Poptún, Petén se le dará seguimiento hasta que mejore.
Entre sonrisas y gestos de alivio, Mildred Johana Téllez (madre de la menor) dijo estar agradecida con todo el equipo médico por el tratamiento que le brindaron a su hija.
“Ella va a seguir compitiendo al ya estar recuperada de su piel”, dijo Mildred Johana quien explicó que los doctores les dijeron que la menor podrá seguir entrenando cuando se sienta mejor.
“Mejor si es por las tardes, cuando no haya sol”, le dijeron.
La mejoría de su hija fue satisfactoria, dijo, y ya no hubo necesidad que la trasladaran a un hospital en Estados Unidos, como fue el ofrecimiento de una organización que ayuda a niños quemados.
“Gladys ya se siente bien, ya solo es que esté mejorándose, que no se exponga al sol y la tengo que llevar a chequeos al hospital de Poptún”., dice Mildred Johana.