Muchos de los viajeros indicaron que es la primera vez que vuelven a Guatemala, por lo que esperan tener buenas expectativas.
Con una sonrisa que resumía su emoción, Nidia de León contó que viajó desde San Diego, Zacapa, para recoger a sus tres sobrinos que llegaron de San Francisco, California.
“Es una emoción. Vienen con nosotros a pasar las fiestas de fin de año. Sentimientos encontrados. Una bendición muy grande”, expresó.
Relató que tiene planeadas varias actividades y paseos para los visitantes, entre ellas encuentros deportivos, comunes durante Navidad en ese municipio, así como viajes por lugares turísticos del país.
“Es una emoción enorme. Hay nervios, hay alegría, hay temores. Incluso corrimos porque el tráfico es muy pesado, demoras en las largas colas, pero ya gracias a Dios aquí reunidos con mis amores que vienen a estar con nosotros”, agregó De León mientras abrazaba a unos sonrientes muchachos.
Uno de sus sobrinos, Carlos de León, de 15 años, expresó que se sentía emocionado y feliz por volver a sus raíces, pero nervioso a la vez porque es su primera vez en Guatemala.
En tanto, afuera del aeropuerto los vendedores ambulantes ofrecen recuerdos de bienvenida para los que visitan Guatemala, e indicaron que para ellos es una fecha de alta demanda por la cantidad de viajeros que arriban al país.
“No hay mucho movimiento, pero gracias a Dios la gente que ha venido ha estado colaborando con nosotros”, dijo Wendy Morales, quien vende toda clase de arreglos para darles la bienvenida a los connacionales.
Contó que esta semana se ha visto cómo ha aumentado el flujo de personas que llegan a la terminal aérea para recoger a familiares.