A las 14 horas ambos abordaron una lancha y salieron a dar un paseo en el lago de Amatitlán.
Mientras navegaban un remo cayó al agua. Ávalos Ruano se quitó la ropa y se lanzó al lago para recuperar el remo. Sin embargo, jamás regresó a la lancha.
“Llevamos tres días buscándolo. Hemos colocado afiches y avisos por todos lados pero la búsqueda ha sido infructuosa”, comentó el lunes recién pasado Jorge Ávalos, padre del fallecido.
“Algunas personas nos han llamado y dicen que lo han visto. Esas llamadas nos han confundido porque nosotros seguimos buscando en el lago”, manifestó.
Ávalos agregó que su familia está sola. “No tenemos quien nos apoye. Necesitamos lanchas para seguir buscando. Yo puedo rentar las lanchas porque quiero encontrar a mi hijo de cualquier forma”, expresó.
Otros casos
Las desapariciones de jóvenes y la pérdida de cualquier rastro han sucedido en otras ocasiones. En junio del año pasado desapareció Alejandro Rodríguez, de 18 años, en la calzada Justo Rufino Barrios, Jalapa.
Rodríguez viajaba en una bicicleta la última vez que su familia lo vio, días después fue encontrado el vehículo de dos ruedas, sin embargo el joven no, pese a los esfuerzos de la familia y las gestiones incluso ante la Procuraduría de Derechos Humanos de Jalapa.
Otro caso más trascendió en 2012, cuando se reportó la desaparición de Wilmer Odair Barillas Tovar, 14, en Palín, Escuintla.
El cadáver de Barillas Tovar apareció días después en Nueva Concepción, Escuintla con un balazo en el rostro.