“Una vez confirmada, se deberá referir a un hospital que cuente con equipo y atención especializada, capaz de monitorear y dar seguimiento a la mamá y al bebé”, indicó.
Según Chávez, la idea es fortalecer a la red de Salud para atender a las familias que no tienen recursos.
Durante un recorrido que efectuó Prensa Libre por Jutiapa, tres familias afectadas indicaron que ha sido escaso el apoyo que han recibido para conocer el diagnóstico de sus hijos y darles atención.
Según datos del Departamento de Epidemiología de la Dirección General del Sistema Integral de Atención en Salud se han detectado 965 mujeres embarazadas con sospecha de zika, de las cuales 275 han sido confirmadas con ese virus; es decir, el 28.49%. Del total de pacientes sospechosas, han dado a luz 179 y han nacido 180 bebés.
Entre los departamentos con más casos de mujeres embarazadas sospechosas y confirmadas con zika se cuentan Guatemala, Baja Verapaz, Santa Rosa, Escuintla, Zacapa, Suchitepéquez, Jutiapa y Jalapa.
Guatemala registra 397 casos sospechosos y 117 confirmados. Esto es contrario a Totonicapán, que a la fecha no reporta ningún caso. En Chimaltenango hay un caso sospechoso, en Sololá cuatro y cinco en Izabal. Según Salud, han nacido 33 niños con microcefalia sospechosos por zika, de los cuales se confirman 17.
Mirna Montenegro, directora del Observatorio de Salud Sexual y Reproductiva (Osar), señaló que en la provincia hay pocas campañas de prevención.
Propuso que se hagan campañas de planificación familiar y se dé a conocer el riesgo de que algunos niños sufran daños neurológicos.
Eduardo Aguilar, director del Área de Salud de Jutiapa, señaló que debido a que el zika se puede transmitir por fluidos seminales, recomiendan a la población abstenerse por lo menos durante seis meses de embarazarse si han padecido esa enfermedad.
Recalcó que para eliminar el zancudo no solo se debe fumigar, porque este ha adquirido resistencia.
“La importancia de esto es hacerle conciencia a los pobladores que son ellos los que tienen que tener el entorno de su vivienda limpio de todos aquellos utensilios no útiles que en algún momento puedan albergar agua”, puntualizó.
Efectos graves
La infección por el virus del Zika durante el embarazo puede causar anormalidades cerebrales congénitas, como la microcefalia.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), “además de la microcefalia congénita se ha notificado una serie de manifestaciones entre recién nacidos de hasta 4 semanas, cuando han estado expuestos al virus del Zika en el útero: malformaciones de la cabeza, movimientos involuntarios, convulsiones, irritabilidad, disfunción del tallo encefálico —por ejemplo, problemas de deglución—, contracturas de los miembros, anomalías de la vista y la audición, y anomalías cerebrales”. La OMS refiere que el virus también puede causar abortos y mortalidad prenatal. No todos los niños con el síndrome congénito asociado a la infección por el virus sufren microcefalia.