Cambia mentalidad
Zoila Bailán, representante de la Fundación en el país, explica que fue fundada en 1964, inspirada en la obra del padre Damián —Jozef de Veuster, danés—, quien en el siglo XIX atendió a enfermos de lepra de las islas Molokai, en Oceanía. Otro sacerdote, el francés Raoul Follereau, organizó el primer Día Mundial de la Lepra, en 1954, cuyo impulso sería la semilla de la Fundación, que lleva 21 años en Guatemala y que a escala mundial tiene unos mil 500 voluntarios.
Durante mucho tiempo esa organización dio apoyo técnico y logístico a las autoridades guatemaltecas para tratar adecuadamente a los pacientes con tuberculosis, pero las directrices desde Bélgica cambiaron en el 2009 y se pidió que hubiera mayor acercamiento con las personas.
Indica que aunque los medicamentos solo pueden ser provistos por el Programa Nacional contra la Tuberculosis, del Ministerio de Salud, se han detectado otras formas de apoyar a las personas afectadas.
Entregan alimentos
Como la tuberculosis es una enfermedad que se asocia a la pobreza, uno de los factores de riesgo es la desnutrición y la baja de las defensas, la organización dota de bolsas de alimentos a los pacientes en extrema pobreza.
De esa cuenta, del 2009 a la fecha se han entregado mensualmente bolsas de alimentos a mil 461 pacientes en situación de extrema pobreza.
Bailán explica que una vivienda inadecuada también contribuye a la propagación de la enfermedad, por lo que desde el 2012 han construido 36 casas nuevas para familias pobres. “Lo que pasa con las viviendas es que el tema de la ventilación es determinante para evitar contagios, pues debe contarse con una casa con una aireación correcta”, refiere.
Micronegocios
La Fundación Damián también busca apoyar a las familias con al menos un enfermo de tuberculosis para que salgan de la situación de pobreza en que se encuentran, por lo que esa organización cuenta con un programa de micronegocios.
Víctor Adolfo González fue diagnosticado con tuberculosis en agosto del 2013, pero hoy se dedica a la crianza de pollos de engorde. “Mi vida tuvo un cambio importante en lo económico, mi familia ahora está mejor”, dice. La Fundación le dio un lote de pollos de engorde, seis quintales de concentrado, 10 láminas, 22 metros de cedazo e igual cantidad de nailon. Así ha salido adelante.
Leishmaniasis
Últimamente, la Fundación también brinda apoyo técnico al Ministerio de Salud para apoyar a pacientes que padecen de leishmaniasis —enfermedad que afecta la piel y las mucosas y causa llagas en la piel—, la cual es transmitida por la mosca chiclera —que habita en Alta Verapaz y Petén—.
Su inspiración
La Fundación Damián existe desde 1964 y fue inspirada en la vida de servicio del beato padre Damián, quien nació en Tremeloo, Bélgica, el 3 de enero de 1840. Es conocido como el leproso voluntario, pues dedicó parte de su vida a cuidar a pacientes con esa enfermedad en la isla de Molokai, Hawai, donde murió el 15 de abril de 1889, a causa de la enfermedad contra la que tanto lucho.
En Guatemala la Fundación Damián tiene 21 años de existir y se dedica a ayudar a pacientes con tuberculosis en situación de extrema pobreza, lepra y lehsmaniasis.
Más información en http://www.fundaciondamian.org.