Durante una conferencia de prensa dijo que tienen un plan maestro de salud que ayudará a descongestionar los hospitales, como parte de este se equipará a los centros de atención de urgencias que hay (alrededor de ocho), se les dotará de equipo y se remozarán, esto para que funcionen en el corto plazo de 120 días.
Cabe recordar que los 44 hospitales que conforman la red de salud pública han enfrentado desabastecimiento de medicamentos y de suministros, así como la falta de presupuesto, lo que compromete la atención hacia los guatemaltecos, que en número han aumentado y desbordan los servicios.
Con relación a este punto manifestó que se trabaja con el Congreso de la República y con el Ministerio de Finanzas para hacer los ajustes necesarios en el presupuesto asignado a la cartera y así atender las necesidades de los hospitales, que la mayoría tiene deuda de arrastre.
Una de las áreas que en esta administración se trabajará es la compra de medicamentos que hacen los establecimiento públicos, y en una segunda fase los fármacos que son comprados por otros establecimientos, esto con la intención de disminuir el gasto de bolsillo que hace las personas para atender el tema de salud en los hogares, a fin de garantizar el acceso de medicina a toda la población. Se busca que lo procesos de adquisición sean transparentes, dijo Cordón.
Combate desnutrición
El ministro de Salud mencionó que una de las prioridades de este gobierno es atender a la niñez, y el tema de la desnutrición crónica y aguda es parte de ello. Por lo que, en los primeros 120 de la administración del presidente Bernardo Arévalo se fortalecerán iniciativas sectoriales por la nutrición que involucran a varios ministerios.
Se comenzará con 7 municipios priorizados, y 33 más para el resto del año, para completar 40 de los 110 que han identificado como críticos en cifras de desnutrición, inseguridad alimentaria y carencia se servicios y saneamiento. Acá se busca poner al día la vacunación del esquema regular en los menores de cinco años, cuya cobertura en los últimos años se ha debilitado y se encuentra por debajo del 95% recomendado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS).