El video compartido en redes, que dura un minuto y seis segundos, muestra cómo el niño con autismo llora, por lo que su amigo se acerca, lo abraza y le seca las lágrimas.
El niño se deja consolar, mientras recuesta su cabeza sobre el compañero, quien continúa con el abrazo y le da palmadas en la espalda.
Además de tocar su nariz, el niño con síndrome de Down toma los brazos de su amigo y los mueve, como una forma de llamar su atención y distraerlo y solo se aleja cuando su protegido asienta con la cabeza como una señal de que está mejor.
La tierna escena se ha compartido en todas las redes sociales y en países tan alejados como la India y ha recabado comentarios sobre cómo esta escena devuelve la fe en la humanidad.
Contenido relacionado
En el Día del Maestro (25 de junio) conozca las historias de estos docentes de educación especial
El síndrome de Down no limita a Sebastián a tocar la marimba
Más de 5 mil personas participaron en carrera a beneficio de Fundación Margarita Tejada