El recorrido, otra vez, de las unidades del Transmetro se da 82 días después de la disposición presidencial que suspendió toda la circulación del transporte público de pasajeros, como una medida para evitar la propagación del coronavirus.
Este sábado, siguiendo los protocolos dictados por el Ministerio de Salud y con mucha menos gente que a la que habitualmente se prestaba el servicio, los buses verdes comenzaron sus recorridos.
Los controles son evidentes: empleados municipales con mascarillas, pantallas protectoras para el rostro, guantes gel antibacterial, vigilan los accesos de las estaciones para guardar el orden, distanciamiento social y evitar las temidas aglomeraciones de los pasajeros.
Las medidas obligatorias que ha dispuesto la municipalidad para todos los pasajeros es:
- El uso de mascarilla
- Distanciamiento mínimo de 1 metro entre cada pasajero
- Aplicación de gel antibacterial
Arriesgado
Sobre los ensayos que lleva a cabo la municipalidad, Alicia Chang, infectóloga y vicepresidenta de la Asociación Guatemalteca de Enfermedades Infecciosas, dijo que este tipo de pruebas es “arriesgado” tomando en cuenta los casos de covid-19 en el país y porque lo recomendado es empezar por un 25 por ciento de pasajeros en cada unidad.
“Siempre existe temor cuando se toman esas medidas porque no saben si el experimento va funcionar. El transporte ha sido un problema en el país y tiene muchas deficiencias. Deberían empezar con un 25 por ciento de capacidad porque cuesta manejar el número de personas que estén juntas”, indicó.
Chang dijo que las medidas como uso de mascarilla, gel antibacterial y que se prohiba el abordaje de personas de la tercera edad y niños son buenas medidas, pero no se sabe cuánto tiempo van a hacer fila las personas en las estaciones y cuánto van a permanecer en el bus.
“Tienen que tener un monitoreo estricto en la unidad para ver que se cumpla con el distanciamiento en cada transmetro, me parece una situación arriesgada”, señaló.
