¿Cuál es el análisis de las novedades de la Encuesta Libre?
Brolo: Observamos que finalmente se ha empezado a estabilizar la intención de voto. Eso no quiere decir que no exista incertidumbre. Es una fotografía que permite evaluar, como foros, debates y estrategia, si la información de los candidatos tendrá un impacto en el votante. El surgimiento de Jimmy Morales es un efecto de esta estabilización de los candidatos.
La caída de Manuel Baldizón es un efecto normal del desgaste de quien ha tenido demasiada visibilización pública por un lado, y lo otro es que la visibilización ha sido de una forma muy negativa. Es el mismo tipo de desgaste del Gobierno.
El politólogo Javier Brolo indicó que la tendencia de los gobiernos es que su aprobación baje conforme pasa su gestión.
Brolo afirmó que la decisión de si el presidente debe renunciar es independiente de cómo se valora la gestión, y ya es una cuestión de decidir qué es más conveniente para la estabilidad del país.
El analista Aníbal Martínez expresó que pudiera pasar que las personas asocien una renuncia con un rompimiento institucional o que exista el sentimiento de que el período ya terminará.
Martínez: El fenómeno Morales habría que verlo dentro de un contexto general. En primer lugar, desde hace ya unos meses hay un contexto de crisis política generalizada en el país, donde las fuerzas tradicionales políticas son precisamente las que se están desgastando con cada destape de casos de corrupción, tráfico de influencias y desorden en el país.
La ciudadanía realmente espera algo nuevo, aunque no conozca qué es. Es el caso de Morales, aunque él represente una fuerza tradicional, es nuevo en la política. Es una apuesta.
Hay 11 candidatos más. ¿Qué podría pasar?
Brolo: El sistema tan fragmentado refleja la poca capacidad de coordinarnos para construir proyectos políticos. No se descarta la posibilidad de que alguno de los candidatos de atrás pueda surgir. La encuesta es un punto de partida.
El 21.3% vota nulo o en blanco. ¿Cuál es el análisis?
Martínez: Hay tres aristas: primero, el próximo gobierno será uno que llegará desde el inicio con poco apoyo de la ciudadanía. Dos, va a ser un gobierno con un poder bastante acotado, y en tercer punto, será un gobierno bastante vigilado.
El hecho de que el porcentaje de intención de voto del candidato puntero sea casi similar al porcentaje del voto nulo o que no sepa por quién, significa que está rechazando el sistema.
Para todos los candidatos, ¿hay tiempo de cambiar las estrategias?
Martínez: Los datos que reflejan las encuestas son un buen referente para los partidos políticos para replantear sus estrategias. El período que queda es poco. En ese contexto de crisis, desconfianza e incertidumbre, los partidos políticos no han sido lo suficientemente imaginativos en su estrategia de propaganda electoral.
¿Qué tanto podría cambiar el panorama electoral?
Brolo: Es incierto. Hay cierta estabilidad en la intención de voto, los votos nulos serán definitivos. Diferencias de 10 puntos porcentuales son corregibles, se pueden intercambiar lugares, intercambiar candidatos. Lo que sí sabemos es que esta va a ser una etapa de información intensa, que puede afectar la intención de voto.
Pérez Molina es desaprobado por el 88% de la población. ¿Qué influyó?
Brolo: En la actual coyuntura es evidente el impacto que el destape de casos de corrupción dentro del Gobierno ha tenido en la ciudadanía. Todos estos mensajes se acumularon y no hubo capacidad alguna de poder justificar la capacidad de riesgo en que se ha llevado el país, y la ciudadanía responde con su desaprobación.
Baldetti es desaprobada por el 92%. ¿Qué pasó con ella?
Martínez: Desde que llegó al Gobierno hubo un tejimiento sistemático de una imagen de aprovechamiento del poder público. Esto se coronó con el descubrimiento y desmantelamiento de la red de defraudación tributaria que dirigía el secretario privado de la Vicepresidencia. Eso contribuyó para que se socavara la imagen de la ex vicepresidenta.