Edna Magaña, propietaria de la casa con el numeral 103, dijo que se trató de un “allanamiento ilegal”, pues la orden de desalojo girada por el Juzgado de Paz Civil de Villa Nueva es contra Fredy Alegría Alegría, quien aparece como subarrendatario del inmueble, a quien, asegura, no conoce.
“La casa se pagó y en el Registro de la Propiedad Inmueble está inscrita a mi nombre. Tengo la documentación que me respalda”, aseguró Magaña.
Agregó que durante el desalojo, su familia fue amedrentada por las referidas personas, quienes cambiaron las cerraduras de las puertas.
La afectada señaló que los abogados que los acompañaban eran custodiados por agentes de seguridad privada.
El otro caso
En igual situación se encuentra la familia que habitaba la casa 107 del mismo residencial.
Kenneth Rosal, tío de la propietaria de este inmueble, explicó que su pariente vive en EE. UU. y que la orden de desalojo llegó en las mismas condiciones que la de Magaña.
“Vinieron con la orden de desalojar al subarrendatario —al que solo identificó con el nombre de Marco Tulio—, al que no conocemos. La casa ya está pagada e inscrita a nombre de mi sobrina”, afirmó.
Ilegalidades
Magaña explicó que ella compró la vivienda por medio de la empresa MCM International Business Corp., S.A., a un costo de US$112 mil, pero que con el tiempo verificó que esta no está inscrita en el Registro Mercantil.
“Lo más complicado es que 90 por ciento de las casas están avaladas por esta entidad”, resaltó.
En agosto último, Magaña denunció en el Ministerio Público a esa compañía por estafa, lo cual es conocido por la Fiscalía Metropolitana.
