A partir de entonces, parte de los esfuerzos editoriales se han enfocado en cubrir a los cinco candidatos punteros y durante esta semana se publicarán entrevistas individuales con cada uno de ellos, en las cuales exponen de manera puntual sus planes de gobierno y cómo prevén hacerlos realidad.
Para este ejercicio se giró una invitación a los presidenciables para responder un mismo cuestionario, centrado en aspectos de interés nacional como seguridad alimentaria, educación, salud pública, generación de empleo, combate a la corrupción y seguridad ciudadana.
Las publicaciones se sujetan al orden de intención de voto que mostró la encuesta del 2 de mayo y por ello, ante la suspensión de la candidatura de Carlos Pineda, de Prosperidad Ciudadana, la primera entrevistada es Sandra Torres, segundo lugar en dicho estudio.
Este será el orden en que se publicarán las entrevistas: Torres, de la UNE; Edmond Mulet, de Cabal; Manuel Conde, de Vamos, y como Pineda queda fuera de contienda, se incluye al sexto lugar de la encuesta: Amílcar Rivera, de Victoria.
Zury Ríos, presidenciable Valor-Unionista, no ha aceptado ser entrevistada y antes de los fallos judiciales, Pineda ya había desistido de participar en estas conversaciones.
Amílcar Rivera: “Los programas que vamos a impulsar volverán a las mujeres productivas”
¿Conoce los índices actuales de desnutrición en Guatemala? ¿Cuál cree que sería el mayor problema para no frenar esta condición?
La desnutrición crónica es alrededor del 47%. El porqué no hemos superado esos índices es la corrupción, porque para los gobernantes y los políticos es un negocio. Se han dedicado a dar un paliativo —alimentos—, no buscan erradicarla, sino seguir llevándose el dinero con la excusa de que ayudan a disminuirla.
¿Por qué cree que su plan de gobierno tendrá éxito en reducir la desnutrición?
Cuando conoce la realidad de los lugares donde está focalizada, lo que encuentra es que los padres de familia no tienen oportunidad de producir, hay pobreza, falta de empleo.
Debemos buscar que la gente sea productiva, y para ello necesitamos sacar la corrupción, establecer seguridad y tener un libre mercado. Con ello lograremos que, por ejemplo, las zonas francas lleguen a esos lugares, implementar el cooperativismo para generar productividad, capacitación, tecnificación. Esa es la única forma de erradicar la desnutrición.
¿Se han trazado una meta de reducción en los cuatro años de gobierno?
Lo que anhelamos es que no haya un solo niño desnutrido en Guatemala. Los políticos tradicionales lo que plantean es llevar solo alimentos. Por supuesto, hay que alimentarlos de inmediato, pero tenemos que volver productivos a los padres.
Mi deseo sería erradicarla completamente, pero es un proceso de mediano y largo plazo que tiene que ser basado en la búsqueda de productividad y de educación, porque la desnutrición está donde está la pobreza.
¿Cómo alejar los programas sociales del clientelismo?
Los quiero transformar. Los programas que vamos a impulsar volverán a las mujeres productivas y que no sigan dependiendo de algo mensual, sino que logren emprender un pequeño negocio que les permita sostenibilidad y ser sustentables en el tiempo, porque si seguimos con los programas sociales tradicionales no lograrán salir adelante. Lo que necesitamos es que las familias puedan encontrar libertad financiera.
En el tema de salud pública, ¿se necesita mejores sueldos para el personal o más contrataciones?
Necesitamos cumplir con los dos temas. Tenemos que revisar la escala salarial en el Ministerio de Salud. Por ejemplo, hay asesores que ganan miles de quetzales y no hacen nada. A ellos hay que sacarlos, pero también hay enfermeras y médicos con un salario penoso.
Miles de salubristas están por contrato. En mi gobierno serán presupuestados -011- para que tengan estabilidad laboral.
Por supuesto que se necesita más personal, pero también una buena infraestructura, más insumos y medicinas.
El precio de los medicamentos es un tema que siempre sale en las críticas al sistema de salud. ¿Se puede bajar su precio y regular ese mercado?
Primero tendremos un ministro de Salud que no represente a farmacéuticas, y a un ministro de Economía que no represente a las élites ni a los sectores económicos del país.
Homologaré los permisos que tiene Estados Unidos, México y Europa de importación, y toda farmacéutica que tenga en esos lugares permiso de importación podrá importar a Guatemala y así romperemos el monopolio de los medicamentos. Es absurdo que en México, El Salvador u Honduras cueste la mitad del precio.
En el Ministerio de Salud adquiriremos medicinas utilizando mecanismos de compra de gran escala como Comisca, que usan Costa Rica y El Salvador, pero el que menos lo utiliza es Guatemala, porque sigue comprándole a los monopolios.
Es cíclica la noticia de corrupción en la red hospitalaria. ¿Cómo garantizar que se acabará?
Nuestro compromiso será con la población y los ministros tendrán metas. Ejerceré mi liderazgo, no me verán inaugurando obras por todos lados, el presidente tiene que ver que los ministros hagan su trabajo, y el que se desvíe un poco debe ser destituido de inmediato y procesado, pero toda la línea de mando. Eso evitará la corrupción.
Necesitamos gente con competencias, con conocimientos, pero el primer elemento para dirigir un ministerio es integridad.
¿Cuál es el plan para fortalecer la educación pública y garantizar la gratuidad?
Quiero traer la educación del pasado al presente tecnológico. ¿Cómo? No quiero seguir imprimiendo libros, pues el costo de hacerlo anda arriba de los Q200 millones anuales, que no los quitan porque es un negocio para alguien. Los niños tendrán una tableta electrónica, eso costará alrededor de Q1 mil 500 millones, que a mediano y largo plazo será más barato.
Tenemos que actualizar a los maestros en temas tecnológicos. Hay que revisar la calidad educativa y con las tabletas podremos tener una educación trilingüe.
Hay que invertir en infraestructura. No creo en tener maestros por contrato, hay que presupuestarlos y que gocen de su escalafón. Hay que arreglar el tema de la jubilación para que funcione como un sistema.
Todos debemos tener una profesión universitaria o aprender un oficio, pero institutos tecnológicos en Guatemala no hay. El reto es construir uno en cada departamento con la vocación de la región. Daremos becas universitarias.
Ahora se destinan millones de quetzales en proyectos de alimentación y seguro escolar. ¿Los mantendría durante su mandato?
La alimentación escolar, entre más se fortalezca, es mejor. En el tema del seguro médico, si un niño tiene un padecimiento y el padre de familia tiene que llamar por teléfono, no lo encuentro lógico, más lo veo como un negocio y lo tenemos que quitar. Con ese dinero, que son más de Q300 millones al año, hay que fortalecer y desconcentrar el sistema de salud pública, tener medicina, insumos, personal.
El presupuesto de educación, en buena parte, está comprometido con el pago de salarios y las negociaciones con el sindicato de Joviel Acevedo siempre son opacas y sin beneficios para los estudiantes. ¿Cuál será la relación que tendrá con el gremio y este dirigente?
Joviel Acevedo ha sido parte del problema del sistema educativo. Trabajaré para el maestro, pero no para ese señor, ni me voy a aliar con él.
En el Ministerio de Educación el recurso más importante es el humano y hay un presupuesto muy alto, que al parecer se usa todo, pero se tienen plazas congeladas de los maestros que se jubilan y no las vuelven a asignar. Hay que descongelarlas para dar oportunidad a los jóvenes maestros.
Regresaré la carrera de magisterio al diversificado, porque nos estamos quedando sin maestros. Las normales se encargarán de formar a los maestros, y los colegios privados que quieran dar la carrera.
En temas económicos, ¿cómo se conseguirá aumentar la oferta laboral con condiciones de trabajo dignas y competitivas?
Los monopolios nos han hecho mucho daño, voy por un libre mercado. Seré un presidente con liderazgo, no seré títere de ninguna élite del país. Abriremos las fronteras, el tema de aranceles, de cuotas. Eso hará que bajen los productos de la canasta básica y también atraerá inversión.
Tenemos que acabar con las pandillas y los extorsionistas como punto clave, porque si no, ¿quién querrá venir a Guatemala para invertir?
El otro elemento es una política pública de movilidad urbana. En el proyecto está hacer un pacto de Estado para construir el anillo metropolitano.
Para atraer inversión, ¿cuáles serían los tres temas claves que necesita el país en un plazo inmediato?
Acabar con las pandillas y extorsionistas, libre mercado e infraestructura.
¿Cree que la carga tributaria es la adecuada para el país?
Considero que estamos bien, el problema es la corrupción, todo se lo roban. Nuestra política no será la persecución sino de apoyo a la gente que emprenda, que haga negocio.
¿Su gobierno va por la línea de más impuestos o de más préstamos?
No quiero más impuestos ni promocionaría más. Nuestra línea es que el dinero se use correctamente y que se pague el precio adecuado con la calidad adecuada, porque aquí se sobrevaloran las cosas y con una calidad pésima. El mejor ejemplo son las carreteras.
El Gobierno nos ha llevado a un déficit fuerte y todo crédito lo que debe generar son activos y oportunidades nuevas.
¿Como garantizar la certeza jurídica para los posibles inversores, con Cortes sin renovar y muchos funcionarios públicos sancionados por corrupción en Estados Unidos?
Lo primero es sacar a los corruptos del gobierno. No podemos seguir teniendo un presidente que quiere controlar todo, porque debemos tener pesos y contrapesos. Quiero ser un presidente con liderazgo, que respete la Constitución. Hoy los presidentes quieren controlar todo, hasta las elecciones, quieren imponernos al presidente, eso no puede seguir pasando.
En seguridad, ¿cuál es su diagnóstico del país y cuáles son los tres principales problemas?
Eliminar la corrupción, acabar con las pandillas y los extorsionistas, controlar las cárceles.
¿La pena de muerte es una solución sostenible para controlar la inseguridad?
Estoy de acuerdo con la pena de muerte, pero no podemos seguirle mintiendo al pueblo. Dicen que con una pequeña legislación van a reactivar la pena de muerte y sabemos que no es cierto. Para activarla hay que denunciar el Pacto de San José, que llevará su tiempo.
El papel del Ejército en temas de seguridad ciudadana, ¿debe ser mayor al actual, menor o ninguno?
Las cárceles de máxima seguridad serán administradas por el Ejército. Instalaré destacamentos militares en las zonas más peligrosas del país. Tenemos alrededor de 45 mil policías y necesitamos 75 mil, y tenemos unos 17 mil soldados. La meta es aumentar el número de policías, 3 mil por año, como al Ejército, 10 mil más.
¿Cómo poner fin al descontrol de sistema carcelario? ¿Las mega cárceles de extrema seguridad son la solución?
Crearé seis cárceles de máxima seguridad, una por cada Brigada Militar administrada por el Ejército, y allí meteremos a los pandilleros de mayor peligrosidad. Y, por supuesto, debemos tener toda una reforma en el sistema penitenciario, hay que dignificar al Policía, que su salario base es menor que el salario mínimo.
En cuanto a la Policía Nacional Civil, ¿tiene un plan para otorgarle más fuerza, recursos e incidencia?
Vamos con una mejora salarial para la Policía Nacional Civil y del Sistema Penitenciario. Hay policías que se han profesionalizado, pero no se les da la oportunidad de ser asesores en el Ministerio de Gobernación y se las daremos.
En el Ejecutivo la corrupción es un problema. ¿Cómo se puede acabar con ello?
Desde ahora, por ejemplo, Sandra —Torres, UNE—, Zury —Ríos, Valor-Unionista—, —Edmond— Mullet y —Manuel— Conde, en cada poste tienen una foto colgada. ¿Cuánto vale eso? ¿Con cuánto se comprometieron y comprometieron al país? Todo inicia en la campaña.
Debemos tener personas con las competencias adecuadas, pero el principio más importante con el que debe contar el presidente, vicepresidente y ministros, secretarios y comisionados, es integridad.
¿Contempla una instancia nueva para la fiscalización de la administración pública, apoya la Comisión Presidencial contra la Corrupción, o cree que con el Ministerio Público y su fiscalía son suficientes?
Esa comisión no ha funcionado. Apenas llegue a la Presidencia la voy a quitar, porque es un dinero que se gasta por gusto.
El primer paso es nombrar gente íntegra; el segundo, tener independencia de poderes, que la Contraloría se fortalezca, que no tenga dependencia ni del Ejecutivo ni del Legislativo y, por supuesto, también las Cortes y el Ministerio Público. Ese es el gran reto que tenemos.
