“No renunciará. Su actuar siempre se ha desarrollado en estricto cumplimiento a la ley, contribuyendo al fortalecimiento del estado de Derecho en el país”, respondió el Departamento de Prensa de la Fiscalía a la cónsul de si Porras pensaba dejar el cargo.
La fuente agrega que “la fiscal general ha complicado fielmente con su función, la cual se enmarca estrictamente en la investigación de todos los hechos denunciados por la ciudadanía guatemalteca para dar respuesta oportuna a las víctimas, quienes tienen derecho de obtener respuesta a su denuncias, garantizando así el respeto a sus derechos humanos, lo cual resulta incompatible con cualquier señalamiento respecto a acciones que atenten contra la democracia, ya que no investigar o promover que no se investiguen determinados hechos fomenta la corrupción e impunidad”.
La Fiscalía rechaza las protestas y dijo que “el servicio que brinda el Ministerio Público es esencial para la población, por ello se ha organizado a las fiscalías para que la atención no se detenga”.
Añadió que “este tipo de bloqueos veda el acceso a la justicia para la población y vulnera gravemente los derechos de las víctimas del delito. No obstante, los servicios del MP no se detendrán”.
“El Ministerio Público es respetuoso de la opinión de todos los ciudadanos, de igual forma del derecho de manifestación toda vez se desarrolle en los términos que la ley establece, sin afectar a la población a través de bloqueos actividades que no tienen respaldo constitución legal y atentan contra los derechos de otros ciudadanos”, señala el MP.
Detalles
Los bloqueos se mantienen en varias regiones del país en demanda de la salida de Porras, el fiscal Rafael Curruchiche y el juez Fredy Orellana, que han liderado cuestionados allanamientos al tribunal electoral y al partido Semilla de Arévalo.
“La única exigencia que nosotros tenemos es la exigencia que se está escuchando a nivel nacional, no hay otra solicitud que no sea la renuncia” de Porras, Curruchiche y Orellana, dijo a la AFP Javier Vielman, líder estudiantil de la Universidad de San Carlos.
Decenas de estudiantes bloquearon con autobuses, cintas y pancartas dos avenidas principales aledañas a la universidad, en el sur de Ciudad de Guatemala.
Los manifestantes lanzaron consignas y entonaron canciones para exigir la renuncia de los tres funcionarios considerados por Estados Unidos como personajes “corruptos” y “antidemocráticos”.
“Estamos respaldando todas las acciones del paro nacional porque es injusto y es antidemocrático que traten de vulnerar el proceso electoral”, agregó Marvin Barco, otro dirigente universitario en la protesta.
Los bloqueos iniciaron el lunes con el cierre de una veintena de puntos carreteros y para este viernes se contabilizan más de 54 tramos cerrados, según la policía vial. El llamado a protestar fue hecho por organizaciones indígenas y se han sumado estudiantes, profesores y comerciantes, entre otros sectores.
La indignación detonó el sábado tras la confiscación de actas electorales por parte de la Fiscalía que investiga supuestas anomalías en las pasadas elecciones. La incautación de los documentos, entre forcejeos con magistrados del tribunal electoral, fue rechazada por la comunidad internacional.
El cardenal guatemalteco, monseñor Álvaro Ramazzini, indicó en una protesta frente a la sede del Ministerio Público en la capital que un “golpe de estado” sería “desastroso y nefasto bajo todo punto de vista”.