La Alianza, conformada por ciudadanos y organizaciones que monitorean las actividades del Organismo Legislativo, detalló que del total de diputados que buscan la reelección, más de la mitad —64— lo hacen con un partido distinto al que fueron electos en 2019.
Asimismo, que de los 124, 24 se cambiaron, incluso de distrito, 12 correrán por lista nacional, ocho por el departamento de Guatemala, dos por el distrito central y otros dos por otros distritos. Además, 15 cambiaron tanto de partido como de distrito y nueve cambiaron de distrito sin cambiar de partido.
El informe da a conocer que solo 20 legisladores no buscan reelegirse, mientras que otros 16, aunque no pretenden retener su curul, buscan otros cargos de elección popular.
En específico, cuatro son candidatos a la Presidencia —Manuel Conde, Armando Castillo, Lecsan Mérida y Bernardo Arévalo—, uno a la Vicepresidencia —Diego González—, siete pretenden alguna alcaldía y cuatro un puesto en el Parlamento Centroamericano (Parlacén).
No van a sesiones
La organización también analizó la asistencia de los diputados al Congreso y resalta que, entre 2020 y 2022 se efectuaron 241 sesiones plenarias y solo 24 de los 160 legisladores asistió al 90% o más del total de estas reuniones.
Diecisiete congresistas acudieron a seis de cada 10 sesiones, o menos. Los más faltistas fueron Carlos Barreda, que estuvo ausente en 132 sesiones; Julio Ixcamey, 121; Oscar Argueta, 119; Rubén Escobar, 115; y Dalio Berreondo, que no acudió a 114.
De los 11, cinco buscan la reelección, uno es candidato a diputado del Parlacén y uno más candidato a alcalde. Asimismo, el informe detalla que los legisladores de Santa Rosa, Sacatepéquez y Petén asistieron a menos del 70 de las sesiones.
Destaca que, según la Constitución y la Ley Orgánica del Organismo Legislativo, dentro de las principales funciones de los diputados están: asistir a las reuniones del pleno y comisiones de trabajo.
Maria del Carmen Aceña, investigadora asociada del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (Cien), una de las organizaciones que conforman la Alianza, indicó que, no por asistir a todas las sesiones se es el mejor diputado, pero acudir a estas es un requisito.
De igual forma remarcó en la importancia de asistir a las reuniones de comisiones de trabajo puesto que son “el corazón del Congreso, donde se decide qué iniciativas se van a pasar al pleno”.
Añadió que es difícil seguir a un diputado y conocer su trabajo, cómo piensan y si rinden cuentas, por lo tanto, considera que el Congreso tiene un gran desafío para hacer que los guatemaltecos empiecen a tenerle credibilidad.
Según la Encuesta Libre de inicios de mayo, apenas el 6% de los entrevistados dijo confiar en los diputados, lo que convierte al Congreso en la entidad pública menos confiable.
Dentro de las conclusiones del informe se señala que el propio Congreso debe crear instrumentos para evaluar a cada diputado y bloque legislativo, y medir su labor en base a su asistencia a sesiones del pleno y comisiones, las iniciativas que presenta y las fiscalizaciones que hace.
Considera que cada bloque legislativo debería presentar su agenda para los cuatro años y así evaluar su cumplimiento.
¿A quién escoger?
En su informe, la Alianza también dedicó un capítulo para orientar a los guatemaltecos acerca de por que candidatos votar en las próximas elecciones.
En primer lugar, indicaron que es importante fijarse en su preparación académica y profesional, aspectos éticos, es decir si carece de sanciones y demuestra honradez y valores a nivel personal y profesional, así como considerar si ha participado en actividades en favor de la comunidad, y si ha recibido reconocimientos por su trabajo en el ámbito público o privado.
Alertaron de que es preciso conocer si un candidato a diputado tiene procesos penales en su contra, si es contratista del Estado, su conducta, si es tolerante a la crítica y la forma cómo se comunica.
Marielos Fuentes, directora de Guatemala Visible, otra de las organizaciones que participan en la Alianza, recordó que la Constitución demanda para optar a cualquier cargo público capacidad, idoneidad y honradez, lo cual no debería ser excepción para los diputados.
“Pareciera que hay muchos aspirantes es que consideran tener estas capacidades, pero no lo han demostrado en los años que los hemos observado“, precisó Fuentes.
Añadió que es usual la manera cómo los partidos integran los listados de candidatos a diputados, en donde los que ocupan las primeras casillas son aquellos que aportaron mucho para la campaña o son muy cercaos a la estructura partidaria.
