Varios manifestantes llegaron a las afueras del condominio a exigir que les abrieran la puerta para ir a verificar que Porras no se encontrar allí.
Los manifestantes gritaban consignas contra la fiscal Porras, y le exigían su renuncia. Porras, el jefe de la Fiscalía Especial contra la Impunidad (Feci), Rafael Curruchiche, y el juez séptimo, Fredy Orellana, son el centro de las manifestaciones, pues la población exige que dejen el cargo por las acciones judiciales que han emprendido contra el Tribunal Supremo Electoral (TSE) y el Movimiento Semilla, partido que postuló a Bernardo Arévalo, presidente electo de Guatemala.
Los manifestantes, que se identificaban como vendedores de mercados, y llegaron a la garita de acceso al condominio para pedir que los dejaran entrar a la casa de Porras.
El grupo de personas exigieron el ingreso, pero no se los permitieron por ser una propiedad privada.
Vecinos del área llegaron al portón para dialogar con los manifestantes y les explicaron que Porras había salido de ese lugar desde la semana pasada y que incluso la seguridad también se había retirado.
Los residentes del condominio le pedían a los manifestantes que no ingresaran, porque en las casas había niños, ancianos que estaban asustados, a lo que los vendedores respondieron que ellos no iban a hacer destrozos ni a robar, sino que querían comprobar que Porras no estuviera allí.
Les dijeron que iban a negociar con los dirigentes del condominio para autorizar el ingreso de líderes del movimiento para que llegara a ver a la casa.
Se mencionaba que en la vivienda estaba la madre de la fiscale general, por lo que los manifestantes pidieron que un grupo de líderes fueran autorizados para entrar a hablar con ella y pedirle que como madre le pidiera a su hija que renunciara.
Luego de varios minutos, no autorizaron el ingreso de ninguna persona y se colocó candado en el portón de ingreso, lo que enfureció a los manifestantes que empezaron a gritar y a forzar el portón.
Un grupo de manifestantes intenta ingresar al condominio en donde estaría la casa de Consuelo Porras. (Video Prensa Libre: Cortesía)
Luego los líderes de los vendedores pidieron cordura, dijeron que no podían ingresar a propiedad privada y si lo hacía, las autoridades podrían tomarlo de excusa para agredirlos.
Finalmente dijeron que no entrarían, pero que se quedarían afuera para que nadie pudiera salir ni entrar, si en dado caso Porras permanecía en el lugar.
Un contingente de la PNC llegó a lugar a dialogar con los manifestantes y les dijeron que no podían tapar el ingreso al lugar, y si lo hacían iban a accionar.
Hasta el momento la situación se mantiene tensa en el lugar.
Luego de varios minutos, la junta directiva del condominio autorizó a un grupo de líderes ingresar al condominio para dialogar y comprobaron que en la casa que supuestamente es de Porras, no había nadie.
Con el pasar de las horas el grupo de manifestantes se dividió y algunos se fueron a protestar a la calzada San Juan y otros se quedaron en ese sitio.
Algunos manifestantes cantaron el himnno nacional frente al condominio y dijeron que no se moverían de allí.
Un grupo de manifestantes canta el himno nacional y afirmaron que no se moverían del lugar. (Video Prensa Libre: Érick Ávila)
Los líderes de la protesta insistieron en que la protesta debía desarrollarse de forma pacífica sin violentar la propiedad privada.
Estudiantes de la Usac también se hicieron presentes a ese lugar y manifestaron que Consuelo Porras debe de renunciar.