Andrés Quezada, del movimiento en Guatemala, explicó que el objetivo es generar cambios que transformen vidas.
De las ideas se seleccionarán tres para entregar un capital semilla de US$5 mil, un lugar físico de trabajo, asesoría y acompañamiento por tres semanas a personas, comunidades o colectivos dispuestos a desarrollar servicios o productos.
Recibirán los emprendedores sociales que sean seleccionados como capital semilla para desarrollar su idea de negocio y asesoría por tres semanas.
El capital es simbiótico, porque aparte de entregar el capital semilla acompañan a las personas, comunidades o colectivos dispuestos a desarrollar servicios o productos que aporten a su entorno.
Luis Melgar, socio fundador de Socialab, comentó que buscan otra opción aparte de la digital para quienes no tienen acceso a internet, por ejemplo, una alianza con Banrural para que por medio de una ficha puedan presentar su idea.
Casos de éxito
Socialab se presentó en Guatemala, en febrero pasado, en el marco de la Cumbre de Innovación Social y Empresarial.
El movimento nació en Chile y su principal objetivo es generar una red de actores para la innovación y el emprendimiento.
En el marco del evento se presentaron emprendedores sociales que han efectuado cambios sostenibles en sus comunidades.
Aquí presentamos algunos de los modelos que son ejemplo de lo que el movimiento Socialab pretender multiplicar.
Comida gurmé sin salir de casa, en Xela
Aquí Me Quedo es un modelo de funcionamiento empresarial nacido de la Asociación Atz’anem K’oj, una Organización No Gubernamental que se dedica a la transformación social y a la defensa de los Derechos Humanos, desde lo artístico, lúdico, y el debate público.
Desde el lado culinario es un restaurante que atiende solo pedidos a domicilio o para llevar.
El Chef francés Stéphane Gué cuida lo sano, lo artesanal y lo accesible a nivel de costo. Gué explicó que las ganancias de Aquí me Quedo son para hacer posibles los proyectos de: Asociación Payasos Atz'anem K'oj y de su proyecto METOCA (Multiplicación y Exploración del Teatro del Oprimido en Centroamérica).
Prácticas agrícolas a cambio de estudio
En la comunidad San Pablo del municipio de Tacaná, San Marcos a 350 kilómetros de la Ciudad Capital, se han transformado vidas de miles de jóvenes.
Hace 30 años los líderes comunitarios incursionaron en la conservación de suelos y apostaron por la educación, la organización y la fe.
Macedonio Pérez trabajó por 15 años en la cooperativa agrícola Asociación de jóvenes ambientalistas y el Instituto de Escuelas Familiares.
Cuando se involucró notó que los jóvenes no tenían acceso a la educación y empezaron a trabajar proyectos de fomento económico con proyectos agrícolas enfocados a la producción orgánica, pecuaria y hortícola, actividades que les ayudaban a cubrir los estudios.
Jóvenes involucrados en cooperativas
El sector cooperativo atraviesa por la necesidad de involucrar en dichas organizaciones a más jóvenes, porque la mayoría está conformada por adultos mayores.
Mónica Velásquez es una de las personas que participa en la mesa de jóvenes dentro de la Confederación de Cooperativas.
El objetivo principal es integrarlos a las cooperativas de pesca, artesanías, transporte, ahorro, crédito, y vivienda, para que puedan aportar e innovar las prácticas que ya se hacen.
La emprendedora, quien tiene contacto directo con la cooperativa de artesanías, asegura que cada vez más jóvenes se involucran en aprender de la experiencia de los adultos y a su vez aportan nuevas ideas para mantener a la cooperativa actualizada.