Carlos Morales, subadministrador del centro de acopio, dio a conocer que en ese sector están prohibidas las ventas de cohetillos y que las pérdidas oscilan en más de Q150 mil.
Añadió que, como medidas de prevención, hace unos días los bomberos dieron capacitación a los vendedores y les propusieron que en cada puesto de venta hubiera un extinguidor, de lo cual hicieron caso omiso.
Los Bomberos Voluntarios se presentaron al lugar para evitar que las llamas continuaran consumiendo otros tramos de mercadería.
Por aparte, el comerciante de objetos de fantasía Santos Hernández indicó que es el primer año que las autoridades municipales autorizan las ventas de juegos pirotécnicos en ese sitio, y por ello también resultó con pérdidas de más de Q5 mil.
El vendedor de ropa y zapatos Mario Ambrosio refirió que perdió Q45 mil, y como todo lo había sacado al crédito no sabe quién pagará todo lo que perdió.
Por lo anterior responsabilizo a la municipalidad, añadió, ya que fue la que autorizó que los comerciantes vendieran esta clase de producto, cuando en años anteriores se dedicaban sólo a ofrecer artículos navideños.