Los acusados son José Guillermo Yupe Ramírez, Griselda Beatriz Álvarez Medina, René Felipe Cardona Morales y Juan Ignacio Florido. Ellos pidieron a la jueza Sara Yoc, presidenta del tribunal, que se dicte sentencia con “objetividad”, de acuerdo con los hechos comprobados durante el debate.
Yupe Ramírez, Cardona Morales y Florido son acusados por el Ministerio Público (MP) por los delitos de asociación ilícita y lavado de dinero. La acusación de Álvarez Medina es por cohecho activo en grado de complicidad.
Florido, durante su última declaración ante el tribunal, arremetió en contra de Sinibaldi y empresarios de la construcción por haber obtenido beneficios en el caso cuando consideró que ellos fueron quienes planificaron y concretaron los negocios que la red criminal gestionó.
“Para mí es sumamente doloroso saber que las personas que realmente coordinaron todo esto, entre ellos los constructores que acá -al tribunal- vinieron a darse golpes en el pecho, y entre ellos Alejandro Sinibaldi, Analiese Herrera y Juan Arturo Jegerlehner Morales -concuño de Sinibaldi-, estén con sus familias y ellos podrán darse un abrazo para Navidad, cuando yo tengo dos años y cinco meses de no estar con mi familia”, lamentó Florido.
En la audiencia, Florido pidió a la jueza “que evalúen con objetividad mi poca participación en esto” y recordó que si se involucró en algún negocio fue como empresario e invitación de Sinibaldi.
“Cuando a mí, Alejandro Sinibaldi me ofreció esto, fue el Alejandro Sinibaldi, empresario, y que tenía una institución con miles de empleados, fue como un negocio en el que podíamos ser empresarios los dos. En el debate está claro que firmé los cheques, pero nunca firmé un cheque que fuera por cosas que no tenían que ver”, aclaró Florido.
Álvarez Medina, dijo: “No se ha demostrado que yo soy culpable de algo que yo tenía el conocimiento de lo que estaba pasando. A mí sí me gustaría que ustedes escucharan la declaración del señor Wálter López donde él nos pide perdón públicamente porque indicó que nosotros no teníamos conocimiento de las decisiones que él tomó”.
La acusada apeló a su juventud y expuso: “Tengo 25 años y apenas estoy empezando mi vida, tengo tantas metas que cumplir y para mí es necesario que se entienda que realmente no hubo participación de mi parte en la empresa y el único responsable es Walter López”.
“Entiendo que estoy acá porque firmé los cheques, pero todos los cheques que firmé siempre venían respaldados de una factura y si era compra, venían con una cotización; si era para sueldos, venían las planillas, firmaba los cheques porque para mí todo estaba bien”, expresó Álvarez Medina.
El caso
A partir de una investigación del MP y la inhabilitada Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala por actividades ilícitas vinculadas con Sinibaldi se descubrió documentación relacionada con varias operaciones de negocios en Guatemala y en otros países.
En la investigación se identificaron empresas de cartón que -por medio de la simulación de servicios- facturaban sumas millonarias de dinero proveniente de sobornos. La facturación de las empresas se realizó de 2012 a 2014, cuando Sinibaldi fungió como ministro de Comunicaciones.
El pago a las empresas de cartón funcionaba como una especie de “ventanilla especial” para los constructores, ya que, una vez depositado el dinero, el engranaje gubernamental operaba a su beneficio, pagándoles deuda que el CIV tenía con las empresas que ellos representan.
Se espera que este 22 de noviembre, a las 14 horas, comience la lectura de la sentencia que el Tribunal emitirá en este caso.
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