El fondo, anunciado en 2014 como una medida para frenar la migración centroamericana promoviendo el desarrollo social de Guatemala, El Salvador y Honduras, cuenta con el “consenso bipartidista en EE.UU.”, reiteró el comisionado.
Destinan fondos
Para hacer frente a la violencia y falta de oportunidades que provoca la inmigración procedente de Centroamérica, el pasado febrero el presidente Barack Obama solicitó al Congreso una segunda partida de US$750 millones de ayuda a la región, dentro del presupuesto de US$50 mil 100 millones para el año fiscal 2017.
El Congreso no ha aprobado aún esos fondos, aunque sí dio luz verde a otros 750 millones para el año fiscal 2016, de los que la mitad estaba condicionada a la certificación por parte de EE.UU. de que cada uno de los países daban pasos para combatir sus mayores problemas, entre ellos la corrupción y la impunidad.
A este respecto, el comisionado afirmó que Guatemala tiene estos temas “bastante avanzados”: “Hemos cumplido con todos los extremos”.
Por eso, espera conocer el próximo jueves día 27, cuando se reunirán con responsables de la cooperación norteamericana, los fondos que el país centroamericano recibirá este mismo año.
En estos últimos meses de 2016, la nueva financiación irá destinada a fortalecer los programas de cooperación ya existentes, precisó Valladares.
