A pesar de no existir indicios de que en Guatemala se consuma fentanilo, una de las drogas más dañinas y adictivas, como ocurre en Estados Unidos y México, otros estupefacientes como la cocaína y la marihuana tienen mercado en el país.
Uno de los peligros es que “no es droga natural”, puesto que ambos casos contienen mezclas con otros productos nocivos para el organismo.
Javier Ramírez, especialista en prevención y tratamiento de conductas adictivas, expone que la cocaína es perjudicial desde el momento en que se fabrica, puesto que la hoja de coca lleva un proceso de elaboración para lo cual se usa cemento, gasolina y soda cáustica, que contienen químicos como ácido sulfúrico para obtener una “pasta cruda” de la que se extrae la piedra de crack y de ahí la cocaína.
“A la hoja de coca molida se le espolvorea cal y cemento, luego se vierte en canecas con gasolina y le sigue un proceso con químicos”, refiere.
“El paso final es alcanzar el clorhidrato de cocaína, por lo que nunca existe en estado puro, solo se alcanza un 98 por ciento. Para obtener un kilogramo de cocaína se utiliza hasta una tonelada de hoja de coca, pero no es natural, puesto que lleva químicos que causan serios daños al sistema nervioso”, subraya.
El cultivo de la planta de coca tiene lugar, por lo general, en Colombia, aunque no descarta que se esté intentando su siembra en Guatemala, por el tipo de terreno, una hipótesis que comparte la PNC, aunque hasta ahora no se ha encontrado el tipo de laboratorios que podrían hacerse cargo de la producción de cocaína, lo que pone en duda que exista la materia prima.
Existen diferentes tipos de drogas que pueden ser medicinales y sintéticas. En el caso de la marihuana se cosechan diferentes tipos, como la K2, Orange Crush, Blue, AK-47, Pin masculina, Pin femenina, Petenera, Santa María, Santa Marta o Santa Mónica, entre otras, las cuales se comercializan en portales electrónicos, de acuerdo con Ramírez.
“El cultivador ha dispuesto ponerles nombres, porque las variantes surgen en ámbitos diferentes. —Los productos de marihuana— pueden ser naturales, cultivados a la sombra o bajo los rayos del sol. Hasta hay un café de marihuana, pero también están las que se mezclan con otras sustancias”, puntualiza el especialista.
Las mezclas
Ejemplo de ello, señala, es que existen mezclas como los “puros” en los que se mezcla la cocaína con la marihuana, y que en las calles se les conoce como abuelo. También está el primo, una combinación de marihuana y piedra de crack. Sin embargo, en los últimos años han surgido drogas más estimulantes, potentes y dañinas.
“La cocaína la mezclan con talco, sal o bicarbonato, pero con ello no tiene otro efecto. Es porque el traficante o vendedor al menudeo piensa que de esa manera la droga abunda más, sin saber el daño que le hace al organismo de quien la consume. Se cree que el efecto será más placentero y menos adictivo, pero causa los mismos daños”, añade.
Más cara
Ramírez hace referencia a la cocaína rosada, un componente de éxtasis con LSD, la cual es consumida solo por cierto estrato social, debido a que el gramo cuesta de Q200 a Q300.
“El que la consume solo tiene un delirio, pero de grandeza, porque al final es una droga sintética que le da al cuerpo un bombazo compuesto por un golpe psicodélico, estimulante y excitante, físico y sexual, pero el daño es severo, puesto que acelera el ritmo cardiaco de inmediato y puede ocasionar la muerte por un paro cardiaco”, advierte.
En tiendas
Por otra parte, la venta libre de algunos medicamentos propicia el consumo de drogas, dice Ramírez, debido a que los compuestos se venden hasta en las tiendas de barrio, como la tiamina, que sirve para mantenerse despierto y que según Ramírez se mezcla con otras sustancias.
“Solo cuesta Q1.50 o Q2 en la tienda, es una pastilla para no caer rendido por el sueño, pero sé de personas que la han llegado a inhalar con otras drogas”, precisa.
Operativos
David Boteo, director de la PNC, hace ver que las drogas son adulteradas con diferentes sustancias y algunas con anestesia de uso veterinario, por lo que llevan a cabo operativos para contrarrestar la venta de droga al menudeo.
“Ya hemos detenido a vendedores de droga, en especial en los alrededores de discotecas y bares, la mayoría de la capital”, manifestó.
