“Creo en la justicia, creo un usted señor juez Gálvez”, dijo Beltranena con una voz entrecortada de frente al juzgador, en la Sala de Vistas de la Corte Suprema de Justicia.
La exasistente vicepresidencial aseguró que desde su regreso de Corea, donde acompañó el último viaje de Baldetti como funcionaria, en abril de 2015, esperó ser citada por el Ministerio Público y siempre estuvo dispuesta a colaborar en las investigaciones del caso La Línea.
Beltranena también aseguró que existe un “terrorismo mediático” que ha alejado a sus amigos y algunos familiares, por el temor de ser perseguidos penalmente, al verse vinculados a ella y el caso Cooptación del Estado.
“Le pido, suplico, imploro señor Juez, que si es su voluntad me otorgue una medida sustitutiva (…) no me deje los años que me quedan de juventud en un centro de detención”, dijo sollozando Beltranena.
“Mi hijo me extraña”
Este miércoles también solicitó su libertad Judith del Rosario Ruiz Blau, exasistente de Baldetti desde que esta fue diputada en el Congreso.
Ruiz durante su intervención, frente a Gálvez, pidió su libertad porque su hija la extraña y es ella quien provee el sustento económico del hogar.
La defensa de Ruiz también expuso ante el juzgador que Ruiz ya no labora para el Congreso, luego de presentar y se aceptara su renuncia y aseguró que no representaría un obstáculo para la investigación de recuperar su libertad.