Este jueves 8 de diciembre se llevó a cabo la audiencia de etapa intermedia en el Juzgado Séptimo, a cargo del juez Fredy Orellana, dentro del caso Chantaje, Impunidad y Lavado de Dinero y fue durante esta que Flora Silva y su defensa manifestaron que se someterían al proceso especial de aceptación de cargos.
Flora Emilza había sido capturada el 19 de agosto pasado y era señalada de lavado de dinero.
El abogado defensor de Silva le dijo al juez que ella deseaba someterse a ese procedimiento que entró en vigor con el Decreto 10-2019 y que esta normativa jurídica es un procedimiento especial y mecanismo anticipado de salida al proceso penal, que no riñe con los derechos y garantías de la Constitución Política de la República de Guatemala y los tratados internacionales ratificados por el país.
EN ESTE MOMENTO
Señaló que la aceptación de cargos es un derecho de toda persona ligada a proceso y así reconocer los señalamientos que efectúa el MP.
“Ella va a realizar una declaración de manera libre, consciente, voluntaria, espontanea y suficientemente informada. Ella conoce las consecuencias de las situaciones y actos cometidos y de dicha cuenta, al aceptar estos cargos, señor juez, nos permite obtener un beneficio procesal… que si el procesado acepta los cargos durante la primera declaración o hasta la audiencia de etapa inteermendia, en la que estamos, pueda tener derecho a 50% de la condena, que en este caso el lavado de dinero es de entre 6 y 20 años de prisión… por lo que el beneficio que podría tener mi patrocinada sería la imposición de la pena mínima que sería de 6 años de prisión, y al obtener el beneficio se reduciría la condena a una pena de 3 años de prisión”, dijo el abogado defensor.
Añadió que por eso se solicitó tres años de prisión conmutables y la suspensión condicional de la pena.
Dijo que su patrocinada jamás obtuvo un beneficio económico por los actos que la tienen en el proceso.
La condena
Luego de la aceptación de cargos, el juez Orellana le preguntó a la señalada si se sometería a este proceso y si lo hacía voluntariamente y sin presiones, a lo que esta respondió que sí. Luego declaró todo lo que le consta del caso.
En la declaración, Silva reconoció que ella solo recibía órdenes de Jose Rubén Zamora, que él era el que tenía el manejo de todo los aspectos financieros y que ella solo planificaba con base a lo que él decidía.
Luego de eso, el juez Orellana le impuso a Silva una sentencia por lavado de dinero que consistió en 6 años de prisión, pago de una multa y Q300 mil.
Reducción de condena
Debido a que Silva aceptó los cargos, y según lo establece la ley, el juez Orellana redujo la condena y la sentencia fue de 3 años de prisión conmutables, a razón de Q5 diarios, y se redujo la multa a Q150 mil.
Además, en esa audiencia se realizó la de reparación digna y luego de una negociación se acordó que Silva debería resarcir al Estado con Q30 mil.
Al pagar los montos establecidos en la sentencia, Silva Flores podrá recuperar su libertad.
Postura de Jose Rubén Zamora
Jose Rubén Zamora, quien no estaba presente en la audiencia de aceptación de cargos de Silva, fue consultado por periodistas sobre la decisión de esta de reconocer el delito por el que la señalaba el MP y dijo que él le había dicho a ella y a Samari Carolina Gómez Díaz, fiscal auxiliar de la Feci también vinculada al caso, que hicieran lo que necesitaban hacer para desligarse del caso, porque ambas no tenían nada que ver.
“Me torturaba mucho que Flory, Silva, teniendo diabetes, teniendo presión alta, pueda liberarse. Quiero contarles que un médico extraordinario me dijo qué suerte está viva. La Fiscalía forzó al -Hospital- San Juan de Dios a que la sacara el día que estuvo ahí hospitalizada”, dijo Zamora.
Añadió que una patóloga fue la que dio la luz verde para que sacaran a Silva del hospital y que esta pudo haber llegado muerta a la cárcel de Mariscal Zavala.
“Es un milagro que esté viva y me siento feliz que se vaya para su casa… yo seguiré con mi lucha y puedo quedarme el resto de la vida reiterando que no cometimos ningún ilícito”, comentó Zamora.
“Pobrecita Flory, debe estar asustada de que yo no sabía -de que iba a aceptar los cargos- pero me siento feliz y se lo voy a hacer saber en cuanto la vea. Estoy muy contento de que vaya para su casa”, afirmó el periodista Zamora.
Al ser consultado sobre si la aceptación de cargos de la exdirectora financiera de elPeriódico iba a afectarle a él en su proceso, respondió que no, pues ellos tienen evidencia contundente, aunque reconoció que su caso es político.
“Por el momento estoy muy feliz por Flory, no merecía esto, es una salvajada lo que le hicieron y yo la apoyo en lo que hizo, fue la mejor decisión”, concluyó Zamora.
