En enero del año pasado Martínez Solís declaró en dos oportunidades ante la Fiscalía Especial contra la Impunidad (Feci) para esclarecer los contratos de seguridad anómalos con la empresa de seguridad Grupo Escorpión.
Un aporte que hizo Martínez Solís es que la exvicepresidenta Roxana Baldetti le pidió que se retiraran las cámaras de vigilancia en su despacho. Además, fue testigo del traslado de dinero, se informó. Los detalles de su colaboración aún están por ser conocidos ante el juez Gálvez.
“En este caso, aprobé la colaboración en enero del año pasado y no se ha concretado su aporte porque se esté oponiendo sino por la carga del juzgado. Su testimonio se conocerá en los próximos meses”, se refirió el juez Gálvez.
Arraigo
Martínez Solís tiene prohibido salir del país y los primeros cinco días de cada mes deberá acudir al MP para el control biométrico.
Además, fue beneficiado con vigilancia policial frecuentemente con patrullajes constantes en su vivienda.
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El sindicado acudió a la judicatura el 2 de junio del 2016. Estuvo en prisión 10 meses hasta abril del 2017 cuando fue internado en un hospital privado por supuestos quebrantos de salud.
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