Preliminarmente se dio a conocer que la víctima fue secuestrada el pasado 24 de septiembre en ruta al Atlántico, cuando se dirigía a su trabajo.
A cambio de su liberación, los ahora capturados exigían Q10 mil. Incluso amenazaron con asesinar a la víctima.
Cuando las fuerzas de seguridad ingresaron a la vivienda para efectuar el rescate, el secuestrado comenzó a gritar en busca de auxilio. Lo encontraron tendido sobre una cama, maniatado y con los ojos vendados.