Además se encontró un teléfono celular sin batería y sin chip, 15 auriculares en mal estado y una onza de marihuana que fue incinerada.
Los decomisos se efectuaron en los sectores uno y ocho de dicha cárcel.
Según el Ministerio de Gobernación, se incrementaron los protocolos de control y vigilancia en 20 centros carcelarios con el objetivo de prevenir desórdenes.
La medida se tomó luego de un motín ocurrido el 29 de noviembre en la Granja Penal Canadá, en Escuintla, donde murieron 17 reclusos. Siete de ellos fueron decapitados y el resto sufrió heridas de arma cortante.
Según las primeras investigaciones, este hecho pudo deberse a que supuestos pandilleros extorsionaban a las visitas, por lo que reclusos que no pertenecen a estos grupos decidieron enfrentarse a ellos.
La capacidad de esta cárcel, inaugurada el 14 de mayo de 1970, es de 600 reos pero alberga a tres mil 92 privados de libertad.
Una delegación de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para Guatemala y de la Procuraduría de Derechos Humanos suspendió una inspección que efectuaría el 1 de diciembre en esa prisión debido a las pocas garantías de seguridad que las autoridades penitenciarias tienen en ese centro.
Con el recorrido se buscaba determinar las condiciones de hacinamiento pero solo pudieron ingresar al área administrativa.
