Los magistrados dejaron firme este viernes la segunda condena por violencia contra la mujer, y consideraron que el futbolista no podía ser beneficiado con la conmuta debido a que es reincidente en el mismo delito.
Pappa había solicitado un amparo para anular la resolución de la Cámara Penal de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), que dejaba firme su condena de cinco años de prisión, pero los magistrados de la CC lo rechazaron.
En febrero de 2022, Marco Pappa había sido condenado a cinco años de prisión inconmutables por el delito de violencia contra la mujer.
En esa ocasión, Pappa dijo: “Pidiendo una disculpa verdad, definitivamente cuando uno ha cometido errores, pues hay que aceptarlos tal vez no como son”.
Sin embargo, en agosto de 2022, la Sala Segunda de Apelaciones de Femicidio ordenó la liberación inmediata del futbolista, luego de reducirle la condena de cinco años a 60 días.
“Se condena al acusado Marco Pablo Papa Ponce a una falta contra las personas, y se impone una sanción de sesenta días de arresto, conmutables a razón de treinta quetzales por cada día dejado de cumplir. Encontrándose el acusado guardando prisión preventiva y que ha sobrepasado el tiempo impuesto de arresto, se ordena su inmediata libertad debiendo el órgano judicial de primer grado emitir la orden correspondiente”, dictaba la sentencia emitida por la Sala Segunda de Apelación de Femicidio.
Primer caso de violencia contra la mujer
Pappa ya había recibido una condena por el delito de violencia contra la mujer en enero de 2020 por parte del juzgado de Femicidio de Quetzaltenango, y la Fiscalía había señalado que el 24 de enero de 2019, la que en ese entonces era la pareja de Pappa, lo había denunciado tres días antes en aquel municipio.
Dicha denuncia señalaba que la mujer había sido golpeada y pateada por el futbolista. Y como parte de los indicios del Ministerio Público (MP), se presentaron fotografías en donde se observaban moretones en el brazo de la mujer.
La denuncia también señaló que la agresión de Pappa había ocurrido debido a que el futbolista intentó salir a la calle en estado de ebriedad, pero ella lo había impedido.
Pappa había aceptado ser procesado por el delito de violencia contra la mujer, de esta forma podía optar por un procedimiento abreviado.