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“No queda duda de la participación de Eduardo Villatoro Cano en los asesinatos y trasiego de drogas, con certeza absoluta y positiva”, dijo una de las juezas.
Cano fue condenado por el asesinato de nueve agentes de la PNC, cuatro particulares y uno en grado de tentativa. Así fue la sentencia:
- Asesinato: 25 años por cada uno.
- Asesinato en grado de tentativa: 16 años y ocho meses.
- Asociación ilícita: ocho años.
- Robo, seis años
- Tráfico y almacenamiento ilícito, 12 años.
El representante del Ministerio Público (MP) había solicitado 823 años de prisión contra el sindicado durante las conclusiones del debate por con el asesinato de policías en Salcajá, Quetzaltenango, en 2013.
La Fiscalía también solicitó al Tribunal de Mayor Riesgo B las penas, que fueran desde tres hasta 533 años de prisión para los 26 presuntos integrantes de la estructura de Cano.
El tribunal resolvió que 12 personas son culpables por mismo delito y absolvió a cuatro. Los sindicados que se encontraban en prisión y fueron absueltos son Nilson Fredy García Pérez, Omar López Solís y Leonardo Choc Chuc. En tanto, los abogados que gozaban de medida sustitutiva y fueron absueltos son Juan Romeo Cruz González y Everardo Esaú Rodríguez López.
El tribunal también dijo que, según las pesquisas, fueron 14 hombres los que entraron a la sede policial en Salcajá, Quetzaltenango, donde fueron masacrados nueve policías. Dos sujetos se quedaron afuera vigilando.
“El crimen cometido en la subestación inició a las 20.18 y finalizó a las 20.20 horas (…) bastaron dos minutos”, dijo el tribunal.
Jueza: "Esa información usted mismo la dió" usted Eduardo Villatoro Cano conversó y dio a conocer cuál era su molestia para matar a ese policial y que fue para quitarse la cólera, porque le habían robado $740 mil dólares. pic.twitter.com/1Wo6uZUJRO
— Sucely Contreras (@SuContreras_gtv) December 4, 2018
Los sindicados
- Eduardo Francisco Villatoro Cano, alias Guayo Cano / el Gordo: ligado por asociación ilícita, asesinato, asesinato en grado de tentativa, lavado de dinero y tráfico y almacenamiento.
- Delmar Dagoberto Calderón Villatoro, alias el Gringón / el Chencho
- René Antonio Pop Luc: ligado por asesinato
- Alfonso/Alfonzo Rax Pop: ligado por asesinato
- Emerson Emanuel Villatoro Cano, absuelto por plagio y secuestro, ligado por asesinato
- Ricardo Quim Guitz: absuleto por plagio y secuestro, ligado por asesinato
- Bacilio Quib Pacay, alias Bazuka
- José Israel Argueta Herrera, alias Chepe: ligado por asesinato
- Francisco Trinidad Castillo Villatoro, alias Cebo / Francis
- Jeremías Rax Chub: ligado por asesinato
- Víctor Ramón Castañeda Pérez
- Israel Pop Cholom: ligado por asesinato
- Édgar Waldiny Herrera Villatoro: ligado por asociación ilícita
- Leonardo Choc Coc: absuelto por asociación ilícita
- Nilson Fredy García Chávez: absuelto por asociación ilícita
- Ángel Alberto Alquijay Jolón
- Bianca Jimena Villtoro Cano
- Nery Rolando González Orellana: absuelto por asociación ilícita
- Édgar Leonidas Cobon Villatoro
- Jenry Rigoberto Vargas Sosa
- Miriam Yolanda Contreras Flores
- Donaldo Saúl Villatoro Cano
- Omar Joel López Solís: absuelto por asociación ilícita
- Amado Baldemar Calderón Calderón
- Carlos Mauricio Andrade Salguero
- Esaú Everardo / Everardo Esaú Rodríguez López: absuelto
- Juan Romeo Cruz González: absuelto
El caso
El 13 de junio del 2013, un grupo de sicarios irrumpió en la subestación de la Policía Nacional Civil (PNC) de Salcajá, Quetzaltenango y ultimaron a los agentes.
La banda también se llevó secuestrado al subinspector César Augusto García, quien apareció desmembrado seis días después.
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Los restos del jefe policial fueron localizado en el río Valparaíso, Huehuetenango. Según las investigaciones, fue torturado, decapitado y descuartizado por los hombres de Villatoro Cano.
Según el Ministerio Público, el presunto narcotraficante Eduardo Villatoro Cano, alias Guayo Cano, originario de Huehuetenango, es el autor intelectual del crimen contra los agentes policiales, a quienes responsabilizó del robo de dinero a su organización.
Guayo Cano fue capturado en Tuxtla Gutiérrez, México y deportado a Guatemala después de 83 días de iniciado un operativo denominado Dignidad, con el que se buscaba encontrar a los responsables de la masacre.
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