Alberto Brunori, representante de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh), abrió la actividad con un mensaje en el que manifestó preocupación por el aumento de la gravedad en las agresiones contra defensores de DDHH.
“Aunque las cifras han disminuido, preocupa que con más gravedad son las agresiones. En los primeros seis meses de 2016 van nueve asesinatos contra defensores y defensoras, y doce casos se registraron en todo el 2015”, resaltó Brunori.
Después de mencionar los nombres de algunas de las víctimas más recientes, el representante de Oacnudh también señaló el “uso indebido” del derecho penal contra los activistas.
Iván Velásquez, jefe de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig), destacó que los defensores de DDHH están en la “primera fila” de construcción de democracia.
“La impunidad produce un efecto multiplicador de la agresión”, expuso el comisionado.
Velásquez, Pascual y Brunori participarán en foro de Derechos Humanos. Foto: Edwin Bercián pic.twitter.com/Z6gddo6pW3
— Geovanni Contreras (@contrerasGEO_PL) June 28, 2016
Además, Velásquez negó que haya injerencia de la Comunidad Internacional en Guatemala, como lo han señalado, entre otras personalidades, el expresidente Otto Pérez Molina.
“Hay un principio de humanidad que es universal y trasciende a cuestiones de países. La Comunidad Internacional está contribuyendo a la defensa de la vida, no puede calificarse de injerencia”, expresó el jefe de la Cicig.
Asimismo, Édgar Pérez, del Bufete de Derechos Humanos, opinó: “Va en aumento la criminalización de los defensores de DDHH, particularmente de defensores del territorio”.
Coincidió Celeste Gutiérrez, del Consejo Diocesano en Defensa de la Naturaleza (Codidena), quien enumeró varios ejemplos de empresas que intimidan a activistas en conjunto con las fuerzas de seguridad.
“El racismo es alto y nos siguen viendo como gente sin categoría, y así comienza la represión. En la formulación de la política de Derechos Humanos debe involucrarse a las comunidades”, agregó Daniel Pascual, dirigente del Comité de Unidad Campesina (CUC).
Cifras de la Unidad de Defensoras y Defensores de Guatemala (Udefegua) dan cuenta que la mayoría de agresiones se registraron en el gobierno de Pérez Molina, con el 49 por ciento, al tomar de base cuatro mil 495 agresiones.
Víctor Hugo Godoy, presidente de la Comisión Presidencial en materia de Derechos Humanos (Copredeh) aseguró que trabajarán con la comisión del ramo del Congreso y la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) para que este año pueda aprobarse la política y un instrumento de protección para activistas.
La procuradora adjunta de los Derechos Humanos, Claudia López, afirmó que, inclusive, funcionarios de varios gobiernos han enviado mensajes de deslegitimación de los defensores.
López ejemplificó que el exvicepresidente Eduardo Stein equiparó a ecologistas con narcotraficantes, y que el exministro de Gobernación, Mauricio López Bonilla, hizo una analogía de los defensores con las maras.
La activista Helen Mack fue una de las más enérgicas, al señalar que la obstaculización a la justicia, amenazas y campañas negras son los principales obstáculos para los defensores.
Puso de ejemplo el caso de Cooptación del Estado, y cómo las “élites” y “los corruptos de siempre” atacan a quienes los señalan, tanto en palabras como a través de las redes sociales y el internet en general, por lo que abogó por reformas al Código Penal para tipificar delitos al respecto.
“Como ya se está cayendo la impunidad, atacan al comisionado con que debe hacerse exámenes psicológicos; a la fiscal general, Thelma Aldana le dicen mentirosa; al embajador de los Estados Unidos, –Todd Robinson– que es un injerencista, al de Suecia, con que es un comunista”, expuso Mack.