Estados Unidos acogerá a 20 mil refugiados de América Latina en 2023 y 2024, y desembolsará US$314 millones en ayuda para migrantes en la región, mientras que México duplicará los permisos de trabajo fronterizos, anunció la Casa Blanca este viernes.
Estados Unidos se compromete a abrir las puertas a 20 mil personas, es decir el triple de refugiados acogidos este año, informó la Casa Blanca en un comunicado.
El gobierno del presidente Joe Biden se propone asimismo “aumentar” la acogida de refugiados haitianos, sin dar cifras, y otorgará 11 mil 500 visas de trabajo temporal a ciudadanos de Haití y Centroamérica ante la escasez de mano de obra en Estados Unidos.
EE. UU. también anunció US$314 millones en nuevos fondos para “ayuda humanitaria y asistencia al desarrollo de refugiados y migrantes vulnerables” en América Latina, incluido un programa para venezolanos que han emigrado a 17 países de la región.
Programas de migración legal
Guatemala, cuyo presidente Alejandro Giammattei no asistió y envió al ministro de Exteriores, dijo en la Cumbre que aprobó una nueva legislación para promover programas de migración laboral legal.
Sin embargo, el canciller guatemalteco, Mario Búcaro, dijo posteriormente que el acuerdo firmado por las naciones “no es vinculante”, según Voz de América.
Se le pidieron a Cancillería más detalles sobre esa propuesta pero no respondió.
El gobierno dijo que lanzará un nuevo programa de trabajo temporal para entre 15 mil y 20 mil personas originarias de Guatemala por año, y se plantea ampliarlo a Honduras y El Salvador a medio plazo.
También México
Según el comunicado sobre la Declaración de Los Ángeles, México aumentará de 10 mil a 20 mil el número de Tarjetas de Trabajador Fronterizo, que permite residir en un estado y trabajar en otro.
Además, con el apoyo de la Agencia de la ONU para los Refugiados, integrará a 20 mil refugiados en el mercado laboral mexicano en los próximos tres años.
En tanto Canadá abrirá sus fronteras a 50 mil trabajadores del sector agrícola.
Unos 7 mil 500 migrantes irregulares, en su mayoría provenientes de Centroamérica, pero también de Cuba, Nicaragua, Venezuela y Haití, intentan cruzar a diario la frontera con Estados Unidos, según datos oficiales de abril.
Otros países
El texto de la declaración enumera algunas de las medidas que asumirán los países, como venía reclamando el gobierno de Biden para “compartir responsabilidades”.
Belice lanzará un plan de regularización para migrantes irregulares, Costa Rica renovará un programa de protección temporal para cubanos, venezolanos y nicaragüenses y Ecuador emitió un decreto en virtud del cual fija una vía para conceder estatus migratorio regular a venezolanos que entraron en el país a través de un puerto de entrada oficial.
En calidad de Estado observador, España “duplicará” el número de vías legales para que los hondureños participen en programas de migración circular.
Veinte países americanos, entre ellos Estados Unidos, México y varias naciones centroamericanas, se unieron este viernes en la declaración con compromisos concretos para contener la crisis migratoria de la región.
La declaración la firmaron Estados Unidos, Argentina, Barbados, Belice, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, Jamaica, México, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay.
Entre quienes no la suscribieron están tres países de origen de muchos de los migrantes indocumentados que recorren el continente: Cuba, Venezuela y Nicaragua, a los que el Gobierno estadounidense decidió no invitar a la Cumbre de las Américas por considerar que no son democráticos.
Biden agradeció en particular los compromisos adquiridos por Costa Rica, Ecuador, México, Guatemala, Canadá y España, país que participó en la cumbre en calidad de observador, representado por la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Pilar Cancela.
*Con información de EFE, AFP y Voz de América