Este al verse ganador, le confió sus preocupaciones a su empleador, solicitando que fuera a cobrar el billete ganador por el que le correspondían tres cuartos de millon de dólares. Ahí comenzaron sus penurias, pues su jefe decidió denunciarlo como ilegal, luego se le inició un proceso de deportación y de los miles de dólares ni noticias.
El abogado de Cua-Toc dijo que al inmigrante guatemalteco “le dio miedo ir a cobrar el boleto y no sabía que las leyes” correctamente que indican que sólo basta una identificación válida para cobrar el premio ganador de la lotería de Georgia, entidad que no verifica el estatus migratorio de los ganadores.
Así pues, Cua-Toc pidió a su empleador Erick Cervantes ir a cobrar el boleto ganador, lo que Cervantes hizo de buena gana. No obstante, lejos de entregar el premio al ganador y no conforme con haber explotado hasta ese momento su condición de ilegal, lo denunció como tal ante las autoridades migratorias.
El abogado de Cervantes dice que fue éste quien mandó a Cua-Toc a comprar los boletos y que le recompensó generosamente. Sostiene que el empleado pretendió una mayor paricipación en los beneficios y comenzó a amenazar y agredir a su empleador.
El 27 de noviembre Cua-Toc fue arrestado luego que Cervantes denunció haber sido objeto de reiteradas”amenazas terroristas” por parte de inmigrante guatemalteco.
La defensa del inmigrante guatemalteco busca que Cua-Toc pueda salir para pelear su caso y que un juez decida el legítimo ganador del premio de la lotería.
