“Gobierno, por favor, muestra algo de corazón. Deja que mis padres sean libres y también todos los demás, por favor, no dejen a los niños llorando”, sollozó. “Mi papá no hizo nada, no es un criminal”, dijo.
Así como ella, otros niños con la mirada triste reposaban sus cabezas en las manos, abrazaban sus mochilas de la escuela o recibían el consuelo de desconocidos en un gimnasio de la ciudad de Forest, una en las cuales hubo redadas.
Jordan Barnes, el dueño de las instalaciones, es un buen samaritano que se ha asegurado de que los niños tengan comida, lugar donde dormir y transporte a la escuela.
Little girl sobs for her father after he was taken during the Mississippi ICE raids. She pleads for him to be let go: "I need my dad." https://t.co/XUQAftIVXF pic.twitter.com/68rru8iVvv
— CBS News (@CBSNews) August 8, 2019
“Entiendo la ley y cómo funciona todo y todo debe tener un sistema. Pero todo el mundo necesita tener a los niños en primer lugar en sus mentes y eso es lo que hemos tratado de hacer aquí es darles un lugar para quedarse y aliviar un poco el dolor”, dijo Barnes a WJTV.
Mathew Albence, director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE), de visita en Guatemala, informó que durante las redadas hubo 390 guatemaltecos detenidos.
Señaló que, como parte de los operativo, fueron liberados algunos del total de 680 indocumentados arrestados.
La Cancillería guatemalteca reportó la noche de este 8 de agosto que son 176 los guatemaltecos detenidos, según un reporte del oficial de ICE a cargo del operativo.