José Graziano da Silva, director regional de la FAO, destacó la vulnerabilidad de Centroamérica, especialmente de la zona del Corredor Seco, frente al cambio climático.
El Corredor Seco es un enorme territorio semiárido que abarca las costas del Pacífico de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá.
Datos de esas organizaciones revelan que la cosecha de cultivos en esa zona ha caído entre un 50 hasta un 90 por ciento.
Destacaron que la situación de crisis ha perjudicado sobre todo a los países del Triángulo Norte.
Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, los desastres naturales han causado daños por US$ 23 mil millones en esa región, donde el 60 por ciento del impacto se concentró en la agricultura y el resto en la infraestructura.
Trabajo
- Mario Méndez, ministro de Agricultura, afirmó que se toman medidas como reforestación en lo alto de cuencas hidrográficas y la implementación de sistemas de riego, pese a la falta de infraestructuras..
Desatención
- Kanayo Nwanze, presidente del FIDA, señaló la falta de atención a la que ha sido la peor sequía en el corredor seco en los últimos 30 años, que ha hecho que 3.5 millones de personas necesiten ayuda humanitaria.
Estrategia
- Ertharin Cousi, directora del PMA, llamó a extender los programas de resiliencia en la zona semiárida para un mayor número de comunidades de forma colectiva y urgió a que se implementen sistema de riego.