“Sobre estos aviones no tenemos una base técnica para saber si la compra de estos aviones es prioritaria o si son los aviones correctos. Lo que creemos es que el proceso se tiene que llevar de una forma transparente, no vimos ninguna base de licitación”, dijo Tefel.
El empresario añadió: “Tendremos que hacer las preguntas al Gobierno, en el sentido que si técnicamente ¿estos son los aviones correctos? y ¿si eso va dentro de una estrategia global de detener el narcotráfico?”.
El presidente de Cacif indicó que en ese sentido no han visto un plan integral para la lucha contra el narcotráfico lo que podría hacer pensar que posiblemente son compras aisladas. “Hay que entender precisamente cuál es el plan para combatir al narcotráfico y dónde caben estos aviones“, dijo.
“Técnicamente no sabemos si son los correctos -aviones- o si habría que comprar a otro país, no lo sé, lo que sí le podría decir es que el proceso no lo vimos transparente, no lo vimos en Guatecompras, no vimos las licitaciones, lo cual nos da a pensar que esto se tiene que aclarar de una manera pronta y rápida”, puntualizó Tefel.
Modifican acuerdo
El mes pasado, el gobierno de Jimmy Morales amplió el Convenio de Cooperación Científica y Técnica entre la República de Guatemala y la República Argentina, que se firmó en 1980, y sería por medio de este que se pudo comprar los aviones Pampa III.
El nuevo acuerdo, denominado Complementario de Cooperación, fue firmado entre los ministerios de la Defensa de los dos países y ratificado por los ministerios de Relaciones Exteriores, informó a Prensa Libre el procurador General de la Nación (PGN), Jorge Luis Donado.
Por aparte, autoridades del Ministerio de la Defensa afirman que con los aviones Pampa III no podrán derribar jets ilegales porque no hay legislación vigente.
Según autoridades, la idea es no dejar que aeronaves del narco utilicen el espacio aéreo, por lo que estos aviones son necesarios.
Añadieron que actualmente cuentan con 24 aeronaves y que en muchos casos estos aviones y helicópteros no pueden superar la velocidad de las naves que utilizan los narcotraficantes.