En entrevista con CNN, Colom dijo que él participará en la comisión y se refirió al suceso como “una violación a los derechos humanos que no prescribe” y un “crimen de lesa humanidad”.
El presidente señaló que nunca había escuchado algo así y que la noticia lo tomó por sorpresa. Analizará además si procede pedir una indemnización por los daños cometidos.
Mientras Guatemala habla accionar y “engaño”, Estados Unidos investiga si hubo “complicidad” por parte del gobierno de ese entonces, presidido por Juan José Arévalo Bermejo.
El presidente estadounidense, Barack Obama, se disculpó con Colom mediante una llamada telefónica. También se comunicaron con él, Hillary Clinton, secretaria de Estado, y el embajador Stephen McFarland.
Sobre la comunicación con Clinton, Colom recordó que hablaron extensamente y que ella manifestó vergüenza y estupor por lo que ha trascendido. (Vea la declaración conjunta de la secretaria de Estado, Hillary Rodham Clinton, y la secretaria de Salud y Servicios Sociales, Kathleen Sebelius).
El suceso
Susan Reverby, una investigadora de la Universisdad Wellesley, descubrió que entre 1946 y 1948 se inoculó intencionalmente a cerca 700 personas con sífilis y gonorrea. Las personas seleccionadas para el experimento eran prostitutas, soldados y enfermos mentales. El objetivo era establecer si la penicilina podía parar que la enfermedad se extendiera por el organismo en las primeras etapas del contagio.
“Se llevaba a los pacientes con prostitutas infectadas y por inoculación directa en el órgano sexual, o en el peor de los casos se les aplicaba una inyección en la médula espinal”, revela la investigación de Reverby.
El equipo, dirigido por el médico John Cutler, alentaba a los pacientes a que sostuvieran relaciones sexuales, para propagar el mal. No existe ningún tipo de informe sobre las conclusiones del experimento, aunque sí hay algunos datos personales de los pacientes y cuadros médicos que permiten determinar que hubo al menos un fallecido, por ataque epiléctico.
Al respecto Colom dijo que la comisión deberá buscar a los pacientes, determinar que pasó con ellos si en caso ya fallecieron y diagnosticar también a los descendientes.