Ese año -2016-, Taracena promovió reformas a la Ley Orgánica del Organismo Legislativo (LOOL) y entre las modificaciones que fueron aprobadas está la regularización en la contratación de asesores.
Aunque los cambios se impulsaron a medida de sus intereses, desapareció la figura de ujier, que ganaba Q4 mil, y se creó la plaza de asesor, que percibe un sueldo de Q26 mil.
Las secretarias pasaron de ganar Q7 mil a Q10 mil, y el sueldo de asistente, que era de Q10 mil, subió a Q14 mil mensuales.
En el período de Óscar Chinchilla la planilla bajó a 920 personas, pero con nuevas plazas y nuevos sueldos. Ese año -2017-, la Contraloría General de Cuentas presentó un reparo de Q72.8 millones a la directiva de Taracena, ya que existían dudas del cumplimiento de funciones de más de mil personas que laboraron entre 2016 y 2017.
Sube y baja
En los dos años de administración de Álvaro Arzú Escobar, el número de empleados contratados bajó y el presupuesto para el pago de sueldos estuvo entre los Q109 y Q144.5 millones.
En la legislatura recién pasada, que tuvo como presidentes a los diputados del bloque Vamos Allan Rodríguez y Shirley Rivera, creció el número de trabajadores en comparación con las cifras de 2017 a 2019.
La partida presupuestaria para el pago de nóminas se elevó hasta Q183.3 millones en esos cuatro años.
Incluso, el pasado 4 de enero, días antes de que terminara el período legislativo, el actual diputado y exsecretario de la Comisión Permanente firmó la actualización del Manual de Puestos y Salarios, renglón 022 del Organismo Legislativo.
Desde la gestión de Taracena, las juntas directivas del Congreso modifican cada dos años ese manual. En este se detalla el nombre del cargo, el objetivo, las funciones, conocimientos requeridos, competencias, experiencia laboral y requisitos mínimos de educación; se crean nuevos puestos y se cambian algunos requisitos para optar a un contrato anual.
La Ley
El artículo 154 Bis de la Ley del Organismo Legislativo —reformado en 2016— establece que cada diputado, por ostentar esa calidad, contará con el personal de apoyo estrictamente necesario.
El legislador tiene derecho a contratar tres personas de su confianza: un asesor que no necesita experiencia laboral y nivel de estudios, aunque su salario no será de Q22 mil como alguien que esté colegiado, sino de Q18 mil mensuales. Además, tendrá derecho a un asistente y secretaria.
Los integrantes de Junta Directiva también tienen derecho a la contratación de tres asesores, cada uno con un sueldo de hasta Q26 mil mensuales, mientras que el presidente podrá contar con cinco asesores.
A cada bloque les corresponden, por ley, dos asesores parlamentarios y se adicionará uno por cada tres diputados. Un ejemplo de ello es la bancada Vamos, que ganó 39 curules, por lo que tendrá derecho a 15 asesores; la Unidad Nacional de la Esperanza, a nueve; y Cabal, a ocho.
La Ley de Servicio Civil del Organismo Legislativo establece en sus artículos 5 y 6 que el personal temporal contratado debe llenar ciertas características, aunque los puestos no se darán en oposición.
Revisión
La primera secretaria del Congreso y encargada del personal, Karina Paz, informó que las contrataciones del renglón 022 y 029 están suspendidas.
Agregó que la anterior junta directiva ofreció contratos por año, por lo que se quiere hacer un análisis de qué personas quieren contratar. “Espero que en estos días se pueda dar el análisis de los 022 y 029”, refirió la congresista.
Boris España, diputado de Vamos que ocupó en la legislatura recién pasada la primera vicepresidencia, justificó que se aumentó el personal del renglón 022 para fortalecer unidades administrativas, seguridad y conserjería, “todas esas personas que servían al Organismo”.
Dicho legislador descartó que existiera desorden en las contrataciones y añadió que están en su derecho de evaluar a la gente, proponer personal distinto o cerrar los espacios.
“El renglón que se contrató no era permanente, para no generar burocracia y costos adicionales al Organismo”, señaló el congresista.
“El renglón que más aumentó fue el de los 022”, resume en su último informe, , presentado el mes pasado, la Alianza por un Congreso Eficiente.
Esa organización destaca que al revisar en dónde estuvieron asignados los empleados temporales en 2023, el mayor número estuvo a cargo de los diputados, pero otro número elevado —323— fue colocado en diferentes direcciones administrativas.