Pero en un video que compartió el equipo de Comunicación Social de la Presidencia, en la que el mandatario explicaba los cambios, no se expone ninguno de los errores que fueron señalados por médicos, enfermeras, diputados y analistas.
“Estamos haciendo una renovación del equipo, de todo el equipo directivo del ministerio, ministro y cuatro viceministros, conscientes de que había un equipo que había estado trabajando, lo ha hecho bien el doctor Monroy le tocó asumir en medio de una crisis mundial con un sistema de salud muy colapsado y que nos ha tocado ir reconstruyendo”, explicó el presidente.
Al mismo tiempo que presentó a la doctora Amelia Flores como la nueva ministra de Salud quien aseguró que está consciente del panorama actual de Guatemala, pero pide a la población confiar en su estrategia de trabajo.
“Estamos comprometidos no solamente a darle continuidad a la epidemia que estamos enfrentando ahora, a todos los problemas que se han dado, a revisar los bloqueos que se han dado para resolver ciertos temas en cuanto a compras y principalmente sacar adelante el resto de programas que no están exentos de tener una atención en cada uno de los servicios” , comentó la nueva funcionaria.
Monroy sigue en el Gobierno
Aunque ya es un hecho la salida del doctor Hugo Monroy como ministro de Salud no es una despedida para la administración de Giammattei. El mandatario también explicó que buscará la colaboración del ahora exminsitro para que asuma una nueva dirección, resaltando que su salida se debe por “cansancio”.
“Esto generó cansancio físico, cansancio mental, pero también nos hizo ver que teníamos que hacer cosas por ejemplo concentrarnos en la construcción de los nuevos hospitales, estamos pidiendo al doctor Monroy que me ayude dirigiendo la unidad médica que se va a encargar dela construcción de siete nuevos hospitales”, añadió el presidente.
Se trata de un proyecto que será gracias a fondos del Banco Mundial y del Banco Centroamericano de Integración Económica, Giammattei explicó que el primero será en Amatitlan y servirá de modelo para los restantes.
Por su parte el Procurador de los Derechos Humanos, Jordán Rodas, critico el hecho que el exministro siga teniendo a su cargo aspectos claves en salud, según él se trata de “un premio a la ineficiencia” y añadió que este tipo de decisiones “continuarán afectando a la población, ya que no cumple con la idoneidad”.
Grandes retos
El nuevo ministerio de Salud se encuentra encabezado por la doctora Amelia Flores, seguida del siguiente equipo de profesionales: Edwin Montufar, viceministro de atención primaria; Francisco José Coma, viceministro de hospitales; Ana Garcés del Valle, viceministra técnica y Nancy Pezzarossi de Calderón como viceministra administrativa.
Para la doctora Iris Cazali, jefa del departamento de epidemiología del Hospital Roosevelt, Flores es una profesional de trayectoria que cuenta con los conocimientos suficientes para sacar a flote a la cartera, aunque añade que los retos que tendrá su equipo de profesional no serán fáciles.
“Los retos para el nuevo ministro me parece a mí que es reforzar la coordinación, acelerar las gestiones para las compras y particularmente el manejo de las pruebas de diagnóstico y el desfogue de las instituciones como Hospital Roosevelt y San Juan de Dios para otras que pueden ayudar con tratamiento a los pacientes”, comentó Cazali.
Por su parte el doctor José Ortiz, quien lidera el observatorio del covid – 19, teme que por lo avanzado de la crisis los nuevos profesionales no puedan hacer grandes cambios, aunque espera que la nueva ministra y sus viceministros trabajen por el bien de Guatemala.
“La designación de personas nuevas no creo que tenga modificación en la epidemia en estos momentos, les desearía suerte a los colegas porque es por el bien del país, pero se enfrentan a un proceso burocrático en el ministerio bastante alto y las capacidades de los mandos medios a nivel local debe de ser alta para que puedan resolver y proponer soluciones, solo un ministro no va a poder”, resaltó Ortiz.
Las opiniones referentes a la destitución del ministro de Salud también hicieron eco entre diputados. La congresista Lucrecia Hernández Mack, exministra de salud, ve oportuna la destitución de Monroy y espera que la nueva administración mejore en la ejecución del gasto.
“Es positiva la destitución del doctor Hugo Monroy por su manifiesta y evidente incapacidad para dirigir el ministerio de Salud y dar una respuesta efectiva ante la emergencia (…) es bueno que haya una mujer nuevamente a cargo del ministerio de Salud y que sea una persona que ya conoce el ministerio, que sabe y tiene experiencia en la administración pública”, indicó.
Por último el diputado Aldo Dávila espera que los problemas que han sido notorios en el ministerio sea cosa del pasado, “esto obedece a la presión social que ha habido por la falta de ejecución presupuestaria, de la contratación de médicos y la falta de insumos, esperamos y confiamos que las autoridades que hoy llegan a la cartera de Salud sean más sensibles, que tengan la capacidad de guiar esta cartera tan importante”, citó el congresista.
