El diputado de la Unidad Nacional de la Esperanza, Fidel Reyes Lee, integrante de la Comisión, fue quien propuso a sus colegas la idea y argumentó que esta propuesta surge porque “es grave lo que puede pasar” cuando este documentos venza.
“Puede causar daños irreparables a los ciudadanos. Cuando el documento venza no se podrán hacer cosas tan sencillas como cambiar un cheque”, afirmó el legislador.
Explicó que tampoco se podría renovar o tramitar una licencia de conducir, un pasaporte e incluso se podría inhabilitar a una persona ante otras instituciones lo que el diputado califica como una “muerte civil”.
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Reyes Lee explicó que, primero invitarán a la diputada Monte para explicarle el punto y saber si acepta que se introduzca un cambio a su iniciativa.
Adim Maldonado, presidente de la Comisión, confirmó que a lo interno de ese grupo de trabajo se discutió el tema y ella habría estado de acuerdo.
Explicó que en la Ley del Registro Nacional de las Personas (Renap) ya se contemplan algunas situaciones por las cuales el DPI se puede cambiar.
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Entre ellos, cuando una persona se cambia de nombre, cuando su apariencia física cambia drásticamente, cuando hay un cambio en el estado civil y cada 10 años.
El congresista señaló que lo que se buscará es que se anule la petición de cada 10 años porque ya existen consideraciones para cambiar el documento, aunque reconoció que esto “es una idea y se necesita hacer análisis”.
Maldonado confirmó que el próximo martes tendrá el primer acercamiento con autoridades del Renap y del Tribunal Supremo Electoral (TSE) para exponerles la idea y trabajar en un dictamen.
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Análisis
Jorge Mario Valenzuela, magistrado del TSE e integrante suplente del directorio Renap, consideró la iniciativa como una “buena idea” que el DPI no pierda vigencia en un año electoral.
Sin embargo, el magistrado mostró dudas acerca de la conveniencia de que el documento no venza nunca, como se hacía con la cédula porque aunque ambos documentos tenían el mismo fin sus características son distintas.
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Valenzuela agregó que en principio el material con el que está hecho el DPI tiene un tiempo de vida útil, es decir el polímero se desgasta y no es lo mismo con la cédula que se podía emplasticar y con eso tener mayor vida útil.
Precisó que la razón por la que se pide el cambio cada 10 años es porque es innegable que una persona cambia físicamente cada década, además recalcó que el material del documento no está diseñado para ser utilizado por más de ese tiempo.
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