Para adquirirlos, el Gobierno gestionó un préstamo por US$36 millones —unos Q279 millones—, los otros dos estarán en Puerto Barrios, Izabal y Petén.
Manuel Augusto López, titular de Defensa, detalló que a pesar de tener los dispositivos únicos en Centroamérica, no contarán con un centro de monitoreo por falta de recursos, pues los fondos destinados para ese proyecto estaban contenidos en otro préstamo que fue anulado.
“Como los van a entregar, tenemos la posibilidad de trasladar datos a la Fuerza Aérea”, afirmó López.
El ministro dijo que la cartera analiza solicitar una ampliación presupuestaria para obtener los equipos para el centro de monitoreo, que puede costar entre US$1.5 y US$8 millones.
Mientras eso ocurre, López manifestó que utilizaran los radares con el monitor que traen, para eso un miembro del Ejército que está capacitado se mantendrá en vigilancia.
El préstamo
El Gobierno canceló en agosto del 2013 la compra a Brasil de seis aviones Súper Tucano, para vigilancia, reconocimiento y combate, luego de haber señalado sobrevaloración en el negocio concretado por la administración anterior.
En esta solicitud monetaria estaba contenido el dinero para el equipamiento del centro de monitoreo, que permitiría el enlace satelital de la información que generen los radares.
Guillermo Orozco, jefe de la Fuerza Aérea Guatemalteca, detalló que los radares tendrán un alcance de 110 millas y que tecnología de ese tipo solo existe en Uruguay.
