El pasado 18 de enero, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, aseguró en un comunicado que EE. UU. tiene “información creíble” que indica que el expresidente Giammattei “aceptó sobornos a cambio del desempeño de sus funciones públicas” durante su mandato.
Días antes, EE. UU. sancionó al exdirector del Centro de Gobierno, Miguel Martínez, con la Ley Global Magnitsky de Responsabilidad de Derechos Humanos, según anunció el Departamento del Tesoro.
Entre los señalamientos contra Miguel Martínez está haber recibido “grandes sobornos por facilitar la compra de las vacunas rusas Sputnik V”. Además, EE. UU. asegura que “se confabuló con otros funcionarios del gobierno guatemalteco para adjudicar ilegalmente contratos”.
Al ser consultado sobre el tema de las vacunas y el retiro de su visa por parte de EE. UU., Giammattei dijo este miércoles a la salida del Parlamento Centroamericano (Parlacén), de donde ahora es diputado, que para eso están los tribunales de justicia.
“Para eso hay un Ministerio Público, hay tribunales de justicia, eso ya fue aclarado mil veces, hay sentencias, al parecer. Yo no les sabría decir porque no estuve en la negociación, pero le puedo dar fe que todo fue hecho de gobierno a gobierno”, dijo el exmandatario.
Respecto a que la visa le fue retirara por supuestamente haber recibido sobornos, Giammattei señaló: “Usted lo dice, supuestamente. Le repito, si usted quiere sacar algo de un sombrero, pensar que va a sacar de allí un conejo no lo va a lograr, le voy a explicar por qué. La negociación se hizo de gobierno a gobierno, del Ministerio de Salud Pública con la empresa rusa del gobierno ruso, de la cual yo ni siquiera tengo conocimiento del contrato, porque está debidamente sellado y está guardado bajo confidencialidad y se firmó un convenio de confidencialidad, por lo tanto, eso se hizo sin intermediarios, y si no hay intermediarios ¿cómo van a haber comisión?”.
Sobre que la visa para entrar a EE. UU. también le fue retirada a sus hijos, el mandatario dijo: “Mire, la mentira luce mientras la verdad prevalece, incluso, cuando ustedes no dicen la verdad”.
El presidente Bernardo Arévalo dijo el miércoles pasado que han encontrado “juguetes” en su despacho en la Presidencia, al referirse a dispositivos de audio y video, pero Giammattei dijo que desconocía de su existencia.
Giammattei aseguró que en el despacho de la Presidencia “nunca hubo micrófonos” y que “si los hubo espero que hayan escuchado bien”.
Además, dijo en el caso de Martínez, la ley con la que fue sancionado por EE. UU. permite resolver los casos en tribunales y “demostrar las incoherencias, pero sobre todo lo que se va a demostrar en un futuro es la injerencia extranjera, ahí lo van a ver”.
Washington “ha dejado claro que apoya a los guatemaltecos que buscan que los actores corruptos rindan cuentas”, añade.
El Departamento de Estado también impedirá entrar en su territorio a los tres hijos del expresidente: Ana Marcela Dinorah, Alejandro Eduardo y Stefano.
En la actualidad, Giammattei goza de inmunidad en Guatemala al haber integrado como diputado el Parlacén, un privilegio reservado a los expresidentes.