Jorge Mario Chajón, director del Instituto, afirmó que la propuesta será planteada en los próximos dos meses, pues en este momento en el Congreso existe un “cuello de botella”, que impediría que sea conocida y discutida.
El Gobierno entabló un diálogo con la Comisión de Turismo para la redacción de la iniciativa, que está próxima a una redacción final.
La idea de las autoridades es que todos los asuetos que sean en martes se adelanten y sean lunes, mientras que las fechas con descanso de miércoles y jueves, se programen en viernes.
Además analizan incluir otras fechas como el Día de la Madre y de la Secretaria.
El Ejecutivo aun no termina de decidir si es colocado como descanso oficial o solo se promulga que se corran y que los trabajadores se arreglen con los patronos a cuanta de vacaciones.
“La expectativa es de 50 por ciento de probabilidades, que se pueda aprobar o que no sea posible”, refirió Chajón.
Más turismo
El Inguat ve en la propuesta una oportunidad para incentivar el turismo interno y que en el interior del país las personas tengan más ingresos.
Aunque ya existe una ley que permite correr el asueto del 30 de junio, Día del ejército, este excluye a todos los otros descansos oficiales.
“En las vacaciones de medio año tenemos un ejemplo en que vemos como la gente se moviliza buscando turismo, esto definitivamente lleva progreso a las comunidades en el interior, se mueven unos tres millones alrededor del país”, enfatizó Chajón.
El director agregó que el año pasado el turismo extranjero fue de 1 millón 750 mil personas de otros países, muy por debajo de lo que el turismo interno genera cada año.
“Con descansos largos esperaríamos que haya movimientos en los hoteles y atracciones en el interior”, refirió Chajón.
Los datos revelan que el turismo extranjero hace visitas a lugares con altas calificaciones internacionales como Semuc Champey, Tikal, Río Dulce y Atitlán. Mientras que hay otros lugares a los que solo los nacionales les gusta asistir.