“Nuestra función y el mandato es presentar ante el Congreso de la República un plan de gasto, y el papel de ellos es calificar, modificar o corregir. Se hizo lo necesario, con eso vamos a trabajar. Somos como el salmón, nadando contra la corriente, pero vamos a trabajar”, expresó el mandatario.
El @MEMguatemala presenta el plan nacional de energía 2017-2032, en el evento participan el Presidente @jimmymoralesgt ministros, otros funcionarios y empresarios pic.twitter.com/5UF3Rwq2cI
— Rosa María Bolaños (@rbolanos_pl) December 1, 2017
Al consultar a Morales si la falta de consenso representaba una “derrota” para el partido oficial, respondió: “¿Qué derrota?, ese es el punto que debemos quitarnos de la mente, el Congreso no es oponente del Ejecutivo, al contrario, es un elemento importante de la República, no es quién gana y quién pierde, nosotros seguiremos haciendo el trabajo”, enfatizó.
Según Morales, en el 2016 se presentó al Congreso de la República, a solicitar recursos que se destinarían al Ministerio Público (MP), a la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC), y al Organismo Judicial (OJ).
“Creo que no es lo correcto, si empiezo a ver que son peleas, victorias y derrotas, creo que no estaría contribuyendo al país, no estamos para enfrentarnos sino para unir las instituciones como manda la Constitución”, enfatizó el mandatario.
Meta fiscal y paro de obras
Analistas económicos concuerdan que ante este escenario el Ejecutivo deberá poner en marcha el plan B, es decir la readecuación del presupuesto del 2017 para el próximo año.
En ese sentido, se realizarán reajustes a meta de cobranza, indicó el intendente, Abel Cruz, que quedará en Q58 mil millones, que es el monto de este ejercicio. “En enero se presentará propuesta”, dijo el funcionario.
El ministro de Finanzas, Julio Hector Estrada, dijo que ante la no aprobación del presupuesto 2018, es una mala noticia que impactará al país. “Prioridades del gasto se verán afectados, por no haber consenso”.
Estrada comentó que solicitarán al Ministerio de Comunicaciones que ya no adjudiquen obras de infraestructura y que revise cuales son los proyectos más importantes de infraestructura.