El más reciente embrollo, y en apariencia el más grave, es la vinculación de su hijo José Manuel Morales Marroquín y su hermano Sammy Morales, quienes están arraigados por ser mencionados durante el tercer día de la audiencia de primera declaración del caso Botín Registro de la Propiedad.
Se trata de un caso de corrupción, cuya erradicación se convirtió en una de las promesas principales en la campaña electoral.
Temas como la tempranera salida de una ministra de su gabinete, la aceptación de diputados tránsfugas en el partido oficial, la pesquisa por espionaje que efectúa la Fiscalía en la entidad que lo protege, y la revertida presentación de un paquete fiscal le han generado desgaste.
También se suma el intento de vetar las reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos.
Mario Taracena, presidente del Congreso, fue el primero en denunciar la acción del presidente, y los magistrados del Tribunal Supremo Electoral, en una conferencia de prensa, lo instaron a sancionarlas, pues significaban un avance en materia electoral.
Los diputados oficialistas tampoco han ayudado, ya que generaron un escándalo por discriminar a una gobernadora. Por esa acción, ocho de ellos perdieron la inmunidad.
Compras superfluas de artículos en ministerios, de las que dieron marcha atrás, y hasta dudas sobre la probidad de Jafeth Cabrera, vicemandatario, se suman a la lista.
A pesar de todo, Morales sale del país mañana. En un momento convulsionado, viaja para participar en la 71 asamblea de la ONU y reunirse con el vicepresidente de Estados Unidos, Joe
Biden.
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La ministra de los 11 días en el cargo
Sherry Ordóñez, quien el 14 de enero fue nombrada al frente del Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda renunció al cargo 11 días después.
Los medios de comunicación revelaron desde el comienzo de la administración de Morales que Ordóñez no podía desempeñar el puesto de ministra por ser contratista del Estado.
La funcionaria constituyó en el 2003 la empresa Ingeniería y Servicios Viales, la cual obtuvo ocho contratos para la supervisión de carreteras entre el 2006 y 2014.
Además tenía una demanda con la Superintendencia de Administración Tributaria.
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Una promesa y diputados tránsfugas
Durante la campaña electoral, Jimmy Morales manifestó que no aceptaría diputados de otras agrupaciones, pero 22 días después la bancada oficial empezó a recibir diputados tránsfugas hasta convertirse en la primera fuerza dentro del Congreso, con 37 diputados.
La mayoría de los parlamentarios eran del bloque Libertad Democrática Renovada, quienes en esa agrupación ya no tenían un futuro político.
El presidente defendió la aceptación de los diputados con un argumento poco sostenible, al señalar que no estaba de acuerdo, pero que el Congreso era independiente del Ejecutivo.
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MP investiga espionaje en la SAAS
Herbert Armando Melgar Padilla, quien fue asesor en materia de seguridad del presidente Jimmy Morales, era investigado por su presunta participación en el espionaje orquestado desde la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad (SAAS) a varias personas del ámbito político y social del país.
No obstante, Melgar Padilla fue protegido por el oficialismo al asumir la diputación que dejó Alsider Arias por supuestos asuntos personales.
Al asumir la diputación por el departamento de Chimaltenango, Melgar Padilla obtuvo inmunidad y ya no puede ser investigado.
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Presenta y luego retira paquete fiscal
Durante su campaña política Jimmy Morales manifestó que no subiría los impuestos; sin embargo, el 12 de agosto presentó al Congreso la iniciativa de ley llamada Recuperación de la Capacidad Fiscal del Estado.
Aunque 13 días después pidió al Organismo Legislativo que le devolviera la propuesta para estudiarla, sin argumentar razones.
Este proyecto de ley generó muchas críticas al mandatario, debido a que el paquete fiscal no fue discutido con los diferentes sectores. El primero en oponerse fue el sector empresarial organizado, que exigía mecanismos de transparencia.
