Mientras tanto, la DGAC libra varias batallas legales para cumplir con la sugerencia de la PGN, debido a que las empresas que fueron beneficiadas en su momento presentaron acciones que impiden la rescisión de los contratos.
Señalamientos
María Eugenia Villagrán, procuradora general de la Nación, detalló cuáles son los contratos y señalamientos de cada uno.
El primero era la construcción de una carretera a un costado de la pista de aterrizaje del Aeropuerto Internacional La Aurora.
“Se detectaron varias irregularidades en la contratación. No se cumplió con la totalidad de la fianza, no se protocolizó, y a criterio de la PGN este contrato lo debe escriturar la escribanía de Gobierno”, afirmó Villagrán. Tenía un monto de inversión de Q25.9 millones.
Los siguientes son dos contratos por el arrendamiento de espacios en la citada terminal aérea.
“Estas áreas, conforme a las normas nacionales y de OACI —Organización de Aviación Civil Internacional—, no podían ser dadas en arrendamiento. En el caso del primero eran tiendas que están en el Aeropuerto”, precisó la procuradora.
Sigue un contrato de servicios técnicos de información de vuelos, el cual fue firmado por un monto de Q5.9 millones.
“Se sugirió la finalización anticipada del contrato porque el costo del mismo es demasiado alto”, aseguró Villagrán.
El quinto contrato es el del uso público del parqueo del Aeropuerto.
La PGN solicitó la lesividad del contrato y la DGAC procedió con el trámite para finalizar en forma anticipada ese acuerdo.
También se pidió la lesividad del contrato de los tanques de almacenamiento de combustible para aeronaves.
“En ambos casos —uso público de los parqueos y tanques de almacenamiento de combustible— no se respetó la Ley de Contrataciones, al no haberse realizado ningún evento de licitación”, precisó la funcionaria.
El séptimo contrato que se sugirió terminar es el de arrendamiento de computadoras para el personal de la Dirección.
“La Procuraduría recomendó que se rescinda, por ser lesivo a los intereses del Estado, debido a que se pagarían Q20 mil por arrendar una computadora y el costo de un equipo en la calle anda por los Q5 mil”, afirmó Villagrán.
La abogada del Estado también reveló que la CGC hizo un hallazgo, el cual consiste en que la DGAC tenía un solo contador digital de energía eléctrica.
Refirió que la recomendación es que cada arrendatario debe tener su propio contador o medidor de energía eléctrica y pagar por ella.
Contratos lesivos para la nación
Construcción de una carretera donde no se cumplió con la fianza y el contrato no se protocolizó.
Según la PGN se arrendó un espacio que según normas internacionales no podían cederse.
Algunas áreas fueron subarrendadas y dejaron en desventaja al Estado.
Sobre la información de vuelos no se presta el servicio de conformidad con las bases del evento.
El parque público tenía un contrato por 15 años, lo que dejaba en desventaja al Estado.
El almacenaje de combustible según el análisis no se realizó ningún evento de licitación.
Se arrendaron 340 equipos de cómputo a Q20 mil cada computadora y se detectó sobrevaloración.
Los medidores de energía según la PGN deberán ser medidos y cobrados individualmente por cada local.
Batallas legales
Héctor Calderón, jefe de la Asesoría Jurídica de la DGAC, apuntó que la Dirección acató las disposiciones de la PGN, pero se libran varios procesos legales para cumplir con las recomendaciones, debido a que las empresas accionan legalmente.
Sobre la construcción de una carretera dijo que el contrato iba aunado al arrendamiento de hangar.
“Tiene la peculiaridad de que se otorgó la construcción de una carretera paralela a la pista. Fue dado a la compañía Fouga International, S. A., y era en forma temporal, pero la recomendación de la PGN y la CGC es que se declarará improcedente”, aseveró el abogado.
Indicó que la empresa presentó un recurso de revocatoria contra la resolución, el cual se dilucida en el despacho del Ministerio de Comunicaciones.
Sobre los contratos de arrendamiento de áreas dijo que se firmaron con las empresas Bisu, S. A., y Distribuidora UCS, S. A.
“Son tres locales que afectan las puertas de abordaje 7 y 19, y el área entre la zona de counters —contadores— en el tercer nivel. Ya se les notificó la resolución de terminación anticipada del contrato”, explicó.
Se determinó que las entidades a las que se les dio el espacio usaron la figura del subarrendamiento, la cual no se puede utilizar cuando hay un contrato vigente. Ya se les notificó, pero las empresas presentaron un recurso de revocatoria.
Sobre el contrato de servicios técnicos de información de vuelos se aseguró que era por cinco años con Indra Panamá.
“Este contrato está por rescindirse porque no se está prestando el servicio de conformidad con los términos de referencia y bases lanzadas dentro del evento. El extremo de la sobrevaloración lo desconozco”, refirió Calderón.
El parqueo de uso público del Aeropuerto se había dado en arrendamiento a Constructores y Consultores Viales, S. A., el cual era por 15 años.
“En este caso, el Estado estaba en desventaja porque había meses buenos y otros no, y por recomendación de la PGN se declaró la finalización anticipada del contrato. Aquí se resolvió el recurso de revocatoria y quedó firme la resolución”, explicó.
Para el arrendamiento y manejo de tanques de combustible se lanzó un evento privado e invitó a algunas empresas, y al final se adjudicó a la empresa Terminales del Atlántico.
“Lo que pasó es que la PGN y la CGC pidieron que se declarara la finalización anticipada del contrato porque no se cumplió con algunos requisitos del contrato”, dijo el profesional, quien explicó que la empresa interpuso un recurso de revocatoria y hay otros amparos que tienen detenido el proceso de anulación.
Sobre el arrendamiento del equipo de cómputo, eran 340 equipos por dos años, por Q6.9 millones. “La PGN indicó que hay sobrevaloración”, subrayó Calderón.
El abogado indicó que el caso del medidor de energía eléctrica es una petición de la CGC porque el Estado está en desventaja, porque se les paga la energía eléctrica a los arrendatarios. “Se espera que cada uno tenga un medidor propio”, dijo.