a prensa mexicana cuestionó que en ese país la pobreza sí se ha reducido, pero no en un amplio margen, pese a varios años que llevan las transferencias condicionadas.
El oficial del FMI respondió que las TMC han tenido éxito en América Latina y que también es notorio en México. “Han hecho una mella en los altos niveles de desigualdad en la región y parecen tener un apoyo social y político muy fuerte”, agregó.
Gaspar sugirió que, para que tengan más éxito, los programas sociales deben ser más focalizados, para asegurar un crecimiento incluyente.
De retroceso
En Guatemala, por el contrario, la pobreza y pobreza extrema aumentaron en ocho años, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida 2014 (Encovi) del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Transparencia y mala ejecución
El Gobierno no efectuó una línea base para hacer evaluaciones de impacto, como ocurrió en México, Brasil y Chile. La ausencia de ese requisito puede ser para no sujetarse a los lineamientos de transparencia. Si bien las transferencias fueron criticadas, hay evidencia de que funcionó en otros países. La falta de continuidad del programa es por los cambios de gobierno.
Las TMC comenzaron a implementarse en el 2008, y si bien se obtuvieron buenos resultados con la ampliación de la cobertura escolar, al parecer no tuvieron incidencia en la reducción de la pobreza. No obstante, se utilizaron de forma clientelar, bajo condición de afiliarse a los partidos de gobierno.
Además, a partir del 2012, las transferencias —Q300 por familia— comenzaron a entregarse de manera irregular.
Se suponía que eran al menos cuatro entregas anuales, pero hubo años en que apenas se entregó una, y ahora el Ministerio de Desarrollo Social lucha por entregar si quiera dos, debido a que en el presupuesto de este año se obligaba a efectuar un censo antes de comenzar la distribución de ese aporte económico.
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Justicia tributaria
En las reuniones del FMI y el BM también se presentó un seminario acerca de la desigualdad, en el que Winnie Byanyima, lideresa mundial contra la equidad y directora ejecutiva de Oxfam International, abogó por la “justicia tributaria”.
Programa ha sido clientelar
Heredamos todos los males de las administraciones anteriores. No se ha cumplido ni suplido la necesidad que tienen las personas. Recordemos que el Mides fue creado como una plataforma política, los programas servían para atender a la clientela.
Las transferencias se entregaban a personas que no lo necesitaban, y eso servía para inflar una estadística.
Además pidió a los gobiernos asumir un liderazgo en la lucha contra la pobreza y que todos los sectores se unan para lograr el financiamiento de la salud y la educación gratuita para posibilitar mejores perspectivas de desarrollo.
“Mientras haya una cuota en la educación, habrá muchas niñas excluidas”, lamentó.
Byanyima incluso sugirió “repensar” la distribución de los recursos.
“Sé que algunos pensarán que esto es un paso rápido al comunismo, pero no lo es. Pensemos en grande para pelear juntos contra la inequidad extrema”, instó.