Guatemala

Presidios carece de perfiles para directores

Las amenazas de las mafias son una de las principales causas por las que ningún profesional quiere dirigir una cárcel, dice exdirector.

El director de la cárcel de Matamoros fue ultimado el 4 de noviembre de 2023.(Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

El director de la cárcel de Matamoros fue ultimado el 4 de noviembre de 2023.(Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

Las condiciones laborales y las presiones de las “mafias” que operan en las cárceles son los factores principales para que ninguna persona con un perfil académico se interese en asumir como director de un centro de reclusión.

Según el titular del Ministerio de Gobernación (Mingob), Francisco Jiménez, solo dos de las 23 cárceles del país tienen directores que llenan los requisitos establecidos por esa dependencia, por lo que comenzaron a buscar perfiles idóneos para designar a los jefes de las prisiones.

Jiménez enfatizó que hasta el gobierno pasado los propios guardias penitenciarios ocupaban esos cargos, ante la falta de personal con mejor preparación técnica y académica.

“Muchos que llenan el perfil no aceptan esa posición. Estamos, entonces, ante un desafío importante de cómo vamos a lograr cubrir las plazas de directores de los centros penitenciarios”, dijo Jiménez.

“Esto presenta complicaciones, como ustedes entenderán, porque no llenan los perfiles aunque tengan experiencia, por lo que es un desafío inmediato. El director del Sistema Penitenciario (SP) tiene la directriz de darle prioridad”, acotó el funcionario.

Entre los principales requisitos que exige el Mingob para dirigir un centro carcelario están tener un título de abogado y notario u otro relacionado con Criminología, y conocimientos en legislación penitenciaria, así como en redacción de informes, computación, y demostrar honestidad y actitudes morales.

Plata o plomo

El exdirector del SP Eddy Morales refiere que antes del 2015 se respetaban los requisitos para optar a director de un centro de detención. Sin embargo, por disposiciones de funcionarios anteriores del Mingob, se obviaron esas normativas y los guardias “se apoderaron de las direcciones”, añade.

Morales estima que la falta de garantías de seguridad y las condiciones laborales son los principales factores por los que ninguna persona quiere ser director de una cárcel.

“Cualquier profesional que quiere llegar a ser director sabe a qué se atiene, porque será absorbido por las mafias que ahora tienen el control”, expone.

“De los 20 aspirantes que acuden a las convocatorias se quedan unos cinco, pero duran poco tiempo, porque amenazan a él y a su familia, y cuando a los directores los reclusos les preguntan si prefieren plata o plomo, mejor se retiran”, precisó.

Morales reitera que a los guardias que dirigen los centros carcelarios no se les incrementa el salario y se aprovechan del puesto para obtener ganancias con lo que pagan los internos para conseguir privilegios.

“Con esto, las estructuras de poder se consolidaron desde el 2016 y por esa razón a los directores generales no les importó, porque les convenía que se mantuviera esa estructura para beneficiarse”, manifestó.

El exfuncionario dice que los guardias y reclusos cobran hasta Q50 mil para quien quiera estar a cargo de una prisión, y no falta quien los pague, puesto que hay seguridad de que recuperará su dinero.

“El problema es que en las cárceles de alta seguridad colocaron a directores sin experiencia, que no saben de gestión penitenciaria, de criminología ni de derecho penitenciario. Los centros carcelarios están en manos de los guardias y de los reclusos”, insistió.

Los guardias que fungen como directores ocupan el cargo por lo menos un año y después son rotados por sus propios compañeros, lo que provoca que mantengan la amistad entre ellos y con los internos, y continúe la cadena de corrupción, agrega.

Corinne Dedik, analista del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (Cien), y quien ha investigado el sistema carcelario en Guatemala, expone que siempre ha sido difícil conseguir personas que quieran ocupar los cargos, y es la razón por la cual los guardias ocupan las direcciones de los centros.

Nombrado

Para dirigir el SP en la nueva gestión de gobierno fue nombrado Sergio Samuel Vela López, quien no es nuevo en las dependencias del Estado, y durante el mandato de Jimmy Morales fungió como titular de la Dirección General de Servicios de Seguridad Privada (Digessp).

El presidente Bernardo Arévalo dijo que llevarán a cabo reformas en la gestión penitenciaria, al considerar que la corrupción en las cárceles es el foco de otras amenazas a la seguridad nacional.

“Pensamos que en las deficiencias del Sistema Penitenciario, y en los estragos que ha causado la corrupción en él, está el foco de gran parte de los problemas de la seguridad ciudadana del país”, aseveró el mandatario.

ESCRITO POR:

José Manuel Patzán

Periodista de Prensa Libre especializado en temas de seguridad, con 18 años de experiencia en periodismo escrito, radial y televisivo. Reconocido con el premio Periodista del Año de Prensa Libre en 2016.