El nuevo infierno para los migrantes podría llegar a su fin, al menos por ahora. Donald Trump, el presidente de los Estados Unidos, dijo que firmará un decreto para detener la separacion de familias que ingresan ilegalmente a su territorio.
Más de 2 mil niños, la mayoría muy pequeños, han sido separados de sus padres que iniciaron el proceso de deportación. Los niños eran llevados a supuestos albergues que por sus características se parecían a cárceles pues eran una especie de jaulas donde dormían en colchonetas en el piso.
Esta política migratoria de cero tolerancia que incluía a niños recibió una condena mundial, fuertes reproches de los países afectados y duras críticas incluso de la esposa e hija del propio presidente Donald Trump.
Los políticos estadounidenses calificaron la política como cruel e inhumana, anti estadounidense y dictatorial. Hay certeza de al menos 465 niños guatemaltecos aprehendidos por la patrulla fronteriza y encerrados en estas jaulas. Un audio en el que los pequeños centroamericanos lloran aturdidos por la captura de sus padres y su posterior separación, sacudió al mundo entero y puso a los EE.UU. bajo la mirada pública.