Son 134 bocetos del maestro Efraín Recinos que están siendo restaurados en El Centro de Rescate, Estudio y Análisis Científico para el Arte CREA.
Uno de los legados significativos de nuestro país en el tema de la arquitectura ha sido las magníficas creaciones que deja como legado el maestro Efraín Recinos, quien falleció el 2 de octubre de 2011.
Muchos de los proyectos quedaron sin ejecución, pero están plasmados en diferentes bocetos donde Recinos deja a la posteridad un concepto vanguardista y filosófico de vida con su particular manera de ver el arte y la vida.
El laboratorio de restauración de papel y los cuales están clasificados por color, bocetos hechos en blanco y negro y los que están realizados a lápiz.
Ana Lucía González, directora de la fundación CREA, comparte que Recinos utilizaba materiales que tenía a la mano y los empleaba para realizar los proyectos que surgían de una llamada telefónica. Existen también bocetos de murales que se quedaron sin concretar por parte del arquitecto y artista, de algunos edificios importantes en la capital.
Existe otro plano donde se observa una de las fachadas del Teatro Nacional. Esta iniciativa para el rescate de los bocetos se origina con la comunicación de Lorena Recinos, hija de Efraín Recinos, para hacer posible este proceso de conservación preventiva y en algunos casos la restauración directa de los bocetos.
Gabriela Chávez, del equipo de restauración de la Fundación CREA, es una de las profesionales que tiene a su cargo la restauración del papel y quien comparte del proceso técnico para rescatar este importante legado y hace referencia del estado de conservación de cada boceto.
Se hace referencia a que el tipo de papel con el que está elaborado cada documento es diferente, por lo que se debe tomar en cuenta que proceso es el conveniente para intervenir el papel. El objetivo de los restauradores es “relentizar” el proceso de degradación del papel y no acelerarlo.
La limpieza del papel inicia en seco con una brocha suave; el documento se trabaja al analizar si las manchas existentes son de origen y no por daño por el paso del tiempo o la humedad, por lo que se hace una prueba con diferentes solventes para tomar la decisión de iniciar el trabajo sobre el papel.
Se utiliza un tipo de gel para evitar que el papel tenga mucha humedad. Uno de los mayores retos para los profesionales de CREA ha sido la temperatura del papel, que puede influir cuando el papel está muy quebradizo, lo que supone la vulnerabilidad al riesgo de deterioro.
Depende mucho el nivel de daño que presente el boceto para responder a los días de trabajo que se utilizarán para su restauración. Cuando son manchas su proceso puede tardar hasta tres días, y un día para corregir rasgaduras y devolver al “apresto”, que es un tipo de aglutinante que tiene el papel y que es aplicado de origen para que pueda recibir bien las tintas.
Uno de los bocetos iconos es la cara sur del Teatro Nacional, por la forma en que está dibujado, la técnica y el cual posee la firma original del maestro Recinos; es considerado por la directora de CREA el más relevante.
Otro de los tesoros es un boceto original y la copia original de una serie de vestuarios que Recinos diseñó para una obra de teatro de Mario Monteforte Toledo. Incluso se revela el costo que se manejaba en ese entonces para su realización.
Los bocetos representan la esencia pura del maestro Efraín Recinos y es un legado que no cualquier persona lo tiene a la mano, por lo que se tiene como proyecto exponer los bocetos en algún centro cultural de la ciudad.
La colección de los bocetos muestra el trabajo de Efraín Recinos desde 1954.
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