Aunque el carbón activado se hizo popular por su capacidad para desintoxicar, también podemos aprovechar sus propiedades para otros usos alternativos en la salud y belleza
En los últimos años se han popularizado varios usos del carbón activado, tanto en la salud como en la belleza. Este producto de origen vegetal tiene interesantes propiedades que le permiten destacarse dentro de la medicina natural.
Sus principales virtudes se le atribuyen a los microporos que componen su superficie. Estos actúan como filtros para atrapar compuestos presentes en un gas o líquido. Tras ser procesado a altas temperaturas, se transforma en un polvo fino negro que es el que suele encontrarse en el mercado.
Hoy en día se sigue posicionando como uno de los “antídotos naturales” más potentes, ya que su acción desintoxicante permite adsorber partículas dañinas como los venenos y toxinas que ocasionan estragos en la salud.
Sin embargo, más allá de estas populares aplicaciones, existen otras utilidades interesantes con las que se puede aprovechar en el hogar. ¿Te interesa conocerlas? ¡Toma nota!
Los múltiples usos del carbón activado han hecho parte de la medicina alternativa desde hace cientos de años. Sin embargo, en la actualidad han vuelto a ganar fama, ya que se sugiere como remedio de muchos problemas comunes.
Su uso principal sigue siendo la desintoxicación del organismo. No obstante, gracias a su acción antiinflamatoria, digestiva y antioxidante, también se ha empleado como base para muchos otros tratamientos. ¿Cómo se utiliza de forma segura?
El consumo de carbón activado puede prevenir esos incómodos síntomas de la indigestión y el exceso de gases tras una comida irritante. Sus compuestos adsorben las partículas que interfieren en la digestión, evitando reacciones inflamatorias.
1 cucharadita de carbón activado en polvo (5 g)
1 taza de agua (250 ml)
Agrega la cucharadita de carbón activado en una taza de agua y dilúyela bien.
Ingiere la bebida antes de comer platos copiosos.
Si sufres de muchos gases, tómala antes de cada comida principal.
2. Remedio para aliviar la resaca
Aunque el carbón activado no absorbe el alcohol presente en la sangre, su ingesta con abundante agua puede acelerar el metabolismo para promover la eliminación de las toxinas que se retienen por un exceso de estas bebidas.
1 cucharada de carbón activado en polvo (10 g)
2 tazas de agua (500 ml)
Agrega el carbón activado en las tazas de agua y mezcla bien.
Modo de consumo
Toma todo el líquido cuando sientas molestias de resaca.
Procura beberlo a sorbos para que se asimile bien.
Gracias a su efecto antiinflamatorio, el carbón activado disminuye los dolores relacionados con la gota. Su aplicación directa reactiva la circulación sobre las zonas afectadas y baja de manera notoria la hinchazón.
Mezcla el carbón activado con el agua en un recipiente hondo.
Sumerge un paño en el líquido y frótalo sobre las zonas afectadas.
Déjalo actuar 30 minutos y enjuaga.
Repite su uso 2 o 3 veces a la semana, según lo consideres necesario.
Mientras que el carbón activado se usa de modo interno para adsorber el veneno que inyectan los insectos peligrosos, de modo externo se puede usar contra las picaduras leves. Sus compuestos antiinflamatorios reducen los hematomas y evitan las alergias.
1 cucharada de carbón activado en polvo (10 g)
½ cucharada de aceite de coco orgánico (8 g)
Combina el carbón activado con el aceite de coco orgánico hasta obtener una pasta.
Dentro de los usos del carbón activado este es uno de los que más llama la atención. Debido a su capacidad de absorción y adsorción, es ideal para purificar la piel y eliminar los residuos que forman puntos negros al obstruir los poros.
1 cucharadita de carbón activado en polvo (5 g)
1 clara de huevo
2 cucharadas de miel (50 g)
Agrega el carbón activado en un recipiente hondo y mézclalo con una clara de huevo.
Bate enérgicamente e incorpora las cucharadas de miel.
Asegúrate de obtener un producto homogéneo.