Qué estrategia utilizó una madre para infiltrarse en una red de trata de personas y liberar a su hija
La estrategia de una madre de familia permitió desarticular estructura dedicada a la trata de personas en Colombia.
Una joven de 19 años desapareció en Colombia y su madre siguió las pistas para ubicar el chat de la banda de traficantes sexuales que mantenía cautiva a su hija.
Como parte de su estrategia, la madre se ganó la confianza de los malhechores y los invitó a una fiesta familiar en la que tomó fotografías de los sospechosos.
Luego, los denunció y las imágenes permitieron que policías rescataran a la víctima, según las autoridades y un reportaje de Noticias Caracol.
Luego de la acción policial, cuatro supuestos tratantes, incluidos una pareja y su hijo, fueron puestos bajo custodia esta semana en un operativo en el que participaron agentes de la Policía Nacional y de la Fiscalía colombiana.
La madre de una de las víctimas relató a Noticias Caracol cómo se infiltró en la organización criminal para lograr rescatar a su hija.
La historia en este caso comenzó en un bar en el norte de Bogotá, donde un hombre invitó a la joven a trabajar en una supuesta empresa de eventos y supuestamente le pagaría bien.
Pero no fue así, ya que se trataba de una trampa para llevarla a un apartamento donde la obligaron a prostituirse, según la madre de la víctima.
“Él la saca a bailar, la asecha con preguntas como: qué hace, de dónde viene, con quién vive, en qué trabaja el papá, la mamá. Le saca información, empieza a decirle que puede hacer que ella gane mucha plata para que pueda estudiar”, añadió la publicación de Noticias Caracol.
“Entonces él dice: ‘Lo que pasa es que nosotros con mi papá trabajamos en una empresa de eventos y allá las chicas nos tienen que acompañar para hacer eventos de diferentes cosas y celebraciones y allá les pagamos muy bien, como por los turnos’”, continuó.
Luego de la conversación, la joven volvió a casa, tiempo después, sin poder conseguir un empleo formal, ella llamó al hombre con el que había conversado en el bar para aceptar su oferta.
Sin embargo, al llegar al lugar, le explicaron que sería una “dama de compañía”.
Luego la habrían abusado y fotografiado desnuda para publicar esas imágenes en internet ofreciendo sus servicios sexuales.
Posteriormente, para evitar que escapara la encerraron en la vivienda, le quitaron su identificación y dinero, y le prohibieron hablar por celular con sus familiares sin que ellos estuvieran presentes, según el narración de la madre.
De acuerdo con la investigación, la joven no fue la única que cayó en la trampa de los malhechores, pues reclutaron hasta 10 jóvenes, algunas menores.
“A ella le daba mucho pesar con esa niña de 15 años, porque sabía que estos hombres eran muy cochinos, muy degenerados”, narró entre lágrimas la madre de la víctima al referido medio.
En su reportaje, Noticias Caracol publicó la imagen que ayudó a desarticular a esta banda.
La mujer y su hija posan en el centro y a sus costados lo hacen los dos malhechores. Detrás de ellos, dos globos que formaban el número 40 quedaron como evidencia de la falsa fiesta donde lograron fotografiarlos.
La madre les había dicho a los tratantes que quería despedirse de su hija en una celebración familiar, luego, logró ubicar el lugar exacto donde su hija era obligada a prostituirse y lo denunció ante las autoridades
Según la Fiscalía colombiana, se trata de “un grupo familiar señalado de contactar jóvenes de Bogotá e inducirlas a realizar actividades sexuales con fines comerciales”.
Hugo Tovar Pérez, director especializado contra las violaciones a los Derechos Humanos de la Fiscalía de ese país, explicó en un video difundido en Twitter que las víctimas eran ubicadas en las redes sociales y en bares. Luego creaban perfiles con sus fotos para prostituirlas.
“Posteriormente eran trasladadas para cumplir esos encuentros íntimos”, afirmó el funcionario.
“En uno de esos casos la organización presuntamente retuvo a una mujer en un inmueble. La sometió a realizar actos sexuales, le quitó dinero y documentos de identidad, y la obligó a ejercer trabajos domésticos sin remuneración a cambio”, dijo Tovar Pérez.
Juan Manuel Vargas Díaz, supuestamente se encargaba de “ubicar y convencer a las mujeres” de ser parte de una “comunidad virtual” donde finalmente las prostituyeron, según la publicación.
Óscar Javier Vargas Laverde, quien es padre de Vargas Díaz, era el responsable de contactar a los clientes y recibir el pago por los servicios sexuales. En total son cuatro los capturados.
Las víctimas, al parecer, eran ubicadas por redes sociales y en bares, vinculadas a una comunidad virtual en la que se ofrecían servicios sexuales, donde les creaban un perfil, y trasladadas para cumplir encuentro íntimos en Funza, Mosquera, Madrid, Facatativá y otros municipios. pic.twitter.com/nAEIilVsKa
— Fiscalía Colombia (@FiscaliaCol) November 2, 2022